El consejero delegado de Marina de Formentera, Ángel Bustos, cuya concesión de la dársena de poniente de la Savina concluye hoy, anunció ayer en rueda de prensa, junto al letrado de la compañía, que «continuará con la explotación» de esta marina «hasta que se resuelva el incidente de medidas cautelares» presentado ante el Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB).
Bustos avanzó que, el pasado 22 de abril, su empresa presentó recurso contencioso ante el TSJB en el que pidieron la suspensión del acuerdo de la APB por el que fue denegada la prórroga que esta empresa reclama por lo menos durante tres años y medio más.
Esta decisión de no abandonar las instalaciones que ahora ocupan surge de un acuerdo adoptado por la junta general de accionistas el pasado 23 de mayo de 2022, para «continuar con la explotación de las instalaciones de la dársena». El recurso contencioso de Marina de Formentera es «contra la resolución de la APB del 23 de febrero de 2022 en la que se deniega la prórroga de la concesión para la gestión de puestos de amarre».
La empresa calificó la decisión de la APB de «insólita, discriminatoria y sin justificación alguna». Y añadió que «no se ha iniciado la modificación de la Delimitación de Espacios y Usos Portuarios, relativa a la nueva ordenación de los espacios de tierra y agua», que incluye la reubicación de las embarcaciones de excursiones marítimas. Esta modificación «afecta a los espacios de la concesión de Marina de Formentera, de la que no existe proyecto alguno que pudiera amparar esa errónea e injusta decisión». La empresa «renuncia a los espacios objeto de esta reordenación que afectan a las superficies de su concesión», según indicaron en su escrito presentado a la APB el pasado 18 de febrero.
