El Consell de Formentera ordenó el pasado 13 de julio el precinto de los 16 apartamentos de Formentera Mar situados en la primera planta del edificio A de la dársena deportiva de Levante del puerto de la Savina. Desde el 4 de agosto hasta el día de hoy se han precintado 14, y quedan pendientes para el 20 y 21 de agosto los dos restantes.

Esta actuación es el resultado de una orden judicial emitida el 10 de junio de este año por el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número uno de Palma, que ratificó el cumplimiento de la sentencia de precinto de la instalación dictada el pasado 15 de julio de 2015.

La historia de la legalización de estos ´camarotes´ para dar alojamiento y servicios turísticos a los clientes del puerto deportivo se remonta a los inicios de la adjudicación en concurso público de esta marina por parte de la Autoridad Portuaria a Formentera Mar en 1993. «Desde el año 98 hemos intentado legalizar la actividad en los ´camarotes´, lográndolo en 2011», informó ayer Fernando Gayá, director de Formentera Mar S.A. Mientras tanto, aseguró que estaban «operando porque [el uso como apartamentos] estaba contemplado en las bases del concurso inicial».

Poco después de que el Consell de Formentera otorgase un permiso «de instalación de la actividad permanente de alojamiento en camarotes» en septiembre de 2011, Marina de Formentera, concesionaria de otra concesión en la Savina, presentó un recurso por «uso inadecuado de las instalaciones». El permiso fue revocado. «Desde 2014 hemos actuado a nivel jurídico en contra de esta resolución», indicó Gayá. «Como consecuencia -añadió-, en 2015 solicitamos una nueva licencia con cambio de usos para despachos, que está contemplado en el plan de usos del puerto de la Savina». A la espera de resolución, los alojamientos han continuado operativos hasta que hace unos días se personó la policía para precintarlos.

El carácter sorpresivo de la actuación, en pleno agosto, supuso un grave trastorno para las personas que se alojaban allí, criticó Gayá. «El comportamiento de la policía fue de absoluta profesionalidad», reconoció no obstante, «y el apoyo de los clientes afectados, ante la incredulidad y las molestias, fue fundamental», agradeció.