Ecodisseny: proyectos de paisajismo en sintonía con la naturaleza de Ibiza

Ecodisseny es una empresa comprometida con el medio ambiente que realiza trabajos de paisajismo, diseño permacultural y bioconstrucción en Ibiza buscando el equilibrio entre las necesidades y gustos de sus clientes y el máximo respeto al entorno. La inclusión de sistemas que permitan la autosuficiencia de la vivienda es una de las prioridades de Ecodisseny, que vela siempre por el aprovechamiento de todos los recursos disponibles para causar el menor impacto posible en la naturaleza.

En uno de sus proyectos más recientes, Ecodisseny ha demostrado una vez más cómo es posible idear una vivienda sostenible gracias al uso de diversas metodologías para sacar el máximo rendimiento al agua de lluvia, creando además un estanque natural que favorece la biodiversidad.

En cuanto al paisajismo, Marcos Tur Witt y su equipo han creado en esta ocasión jardines mediterráneos de bajo consumo de agua, un olivar y un bosque comestible que no solo sirven de ornamento sino que también generan una clara vinculación con la antigua finca agrícola.

«El proyecto nace gracias al estudio de arquitectura ‘deBM’, dirigido por Juan Echevarría, quien nos contacta para acometer unproyecto de paisajismo sostenible», explica Marcos Tur Witt, diseñador de este proyecto. Se trataba de una gran finca agrícola y forestal en la que el bosque había colonizado los antiguos bancales de cultivo.

En ese entorno, con la construcción de una vivienda encajada entre los muros de piedra seca, el objetivo era «tratar de respetar al máximo la cultura del lugar», y no solo no dañar el ecosistema sino favorecerlo mediante diferentes técnicas de paisajismo.

Recogida de agua de lluvia

«En primer lugar, analizamos el mejor modo de proteger, manejar y gestionar el recurso agua, una prioridad en nuestros proyectos», apunta Tur Witt. En la finca contaban con una red de caminos de cerca de un kilómetro que se van a arreglar para evitar que el agua de lluvia se vaya por un torrente y lograr su máximo aprovechamiento. «Vamos a crear un canal de sedimentación para eliminar la arena, las arcillas y los restos de hojas que pueda llevar el agua, para almacenarla en una gran cisterna para su utilización en el riego de jardines y huertos».

Creación de un estanque natural

El agua que se recoge de los caminos, además de ir a la cisterna, alimenta un estanque natural, un elemento clave en la restauración del ecosistema. «Crear un biotopo acuático en una finca incrementa su biodiversidad», subraya Marcos Tur Witt. Con este entorno, consiguen que haya más presencia de polinizadores (las abejas necesitan beber agua y en el estanque tienen un lugar idóneo para hacerlo), ranas que irán al huerto y se comerán las babosas, pájaros que se comerán los insectos que haya en el huerto o en los frutales... «Es realmente beneficioso para el paisaje».

Jardín de lluvia

El aprovechamiento del agua de lluvia va más allá de la cisterna en proyectos como este. Cuando el depósito se llena, entra en juego el jardín de lluvia creado por Ecodisseny para regenerar los acuíferos, que en Eivissa están muy castigados. El jardín de lluvia es una infraestructura que ayuda a infiltrar el agua que sobra de la cisterna, de la limpieza de las terrazas y otros elementos en la tierra para regenerar los acuíferos. «Los pozos son el último recurso que utilizamos», remarca Marcos Tur.

Olivar y bosque comestible

En la cara sur de la vivienda, Ecodisseny quitó el bosque y lo convirtió en un olivar. Los propietarios de la casa deseaban tener olivos para generar su propio aceite. «Además, liberando la cara sur de la casa estamos permitiendo que el sol bañe esa fachada sur y en invierno sea una casa más cálida y confortable ahorrando así mismo energía en climatización. A través del diseño de paisaje podemos modular el clima de la vivienda», expresa Marcos Tur Witt.

Sin embargo, el olivar no se queda ahí, sino que en él han incorporado un bosque comestible, intercalando frutales, arbustos, plantas pequeñas y todo tipo de vegetación productiva. «Lo hemos convertido en un vergel muy rico, lleno de frutas y verduras, y hemos incorporado también un huerto, todo mezclado, como una fusión».

Este trabajo de jardinería, unido a otros espacios de árboles de flor, logran un diseño de jardín con una estrecha vinculación a la antigua finca agrícola. «Estamos haciendo un jardín ornamental pero también un espacio agrícola donde producimos nuestro propio aceite, producimos fruta, verdura... intentando que todo sea autóctono».

Jardín mediterráneo y árboles de flor

El jardín principal, el más cercano a la vivienda, es un jardín mediterráneo creado con plantas de muy bajo consumo de agua. En él se pueden encontrar también muchos árboles de flor como almendros, cerezos, perales, ciruelos... En este área de la vivienda la elección se ha basado en especies mediterráneas, plantas de Balears lo más adaptadas al clima. «Este jardín honra el espíritu de la antigua explotación agrícola».

Jardín más sofisticado

En el centro de la vivienda, Ecodisseny ha creado un jardín mucho más elaborado, de plantas más sofisticadas que necesitan un poco más de riego. El equilibrio entre los deseos de los clientes, en este caso británicos, y el cuidado del medio ambiente, se ha buscado del mejor modo posible, evitando al máximo el uso de césped. «Nos lo han pedido pero lo hemos limitado al máximo, y al aplicarlo hemos escogido una variedad que necesita muy poca agua», comenta Marcos Tur Witt.

Gestión forestal

Para abordar este proyecto, en el que el bosque había colonizado gran parte de la finca, se han tenido que realizar dos acciones principales: por un lado, arrancar muchos pinos para hacer una recuperación del cultivo; por otro, una gran limpieza forestal de la que ha salida un montón de material, biomasa (ramas secas, arbustos...) que se ha utilizado para diferentes fines en el proyecto.

• Acolchados. Una parte de esa biomasa se ha triturado y convertido en acolchados, que se ponen encima del suelo en el entorno de las plantas. Esta acción evita tener que regar tanto las plantas, porque el sol no evapora el agua del suelo. Además, fertiliza los suelos porque se va degradando y se convierte en alimento para las plantas.
• Carbón vegetal. Al quemar de forma especial (como las antiguas sitges payesas) las ramas de los pinos que se han arrancado, se han obtenido un carbón vegetal que, triturado muy fino e inoculado de microbiología, es un elemento óptimo para los suelos. Por un lado, ayuda a que el suelo se convierta en una esponja, reteniendo el agua por más tiempo gracias al carbón. Por otro, la microbiología ayuda a los procesos de fertilización que necesita la planta y estabiliza los suelos.
• Compost. Otra parte de la biomasa obtenida se ha triturado muy fina, se ha mezclado con estiércol de gallina, oveja o caballo y se ha convertido en compost, el fertilizante que se ha utilizado en los jardines.

Cultura y patrimonio

«Al llegar a la finca, vimos que el arquitecto había ubicado la casa entre dos bancales para no dañar las paredes existentes en el lugar. Nosotros hemos ido por el mismo camino: tratar de respetar al máximo el patrimonio existente». En este sentido, Ecodisseny ha realizado un gran trabajo de recuperación de cientos de metros de muros de piedra seca que se encontraban en mal estado. Además, para pavimentos, escaleras u otros elementos arquitectónicos han promovido, como siempre, el uso de piedra de Ibiza. «Siempre intentamos utilizar materiales kilómetro cero para no incrementar el coste energético en transporte ni el económico. Siempre que se puede, piedra local, de Mallorca o como máximo de la costa de Levante».

Un proyecto que, en su conjunto, se ha diseñado para respetar al máximo el ecosistema, recuperando los bancales para el cultivo, promoviendo de nuevo agricultura y la producción de alimentos para la vivienda y logrando que sea lo más autosuficiente posible.

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