La primera teniente de alcalde de Sant Josep, Paquita Ribas, defendió ayer en el pleno «el derecho» de los agentes de la Policía Local a disfrutar de vacaciones en verano «como todo el mundo, sobre todo si tienen hijos pequeños». «Hablamos de las vacaciones de la Policía como si fuera un pecado mortal», agregó, en respuesta a las críticas de la portavoz del PP, Neus Marí, por «la falta de policías» durante el pasado verano.

En una moción de control para pedir que en 2018 «no se repitan los errores cometidos esta temporada», Marí lamentó que en pleno verano hayan coincidido durante «varias semanas» hasta 16 agentes de vacaciones. Mucha gente nos dice que no entiende cómo puede ser que con 50 policías contratados haya turnos de sólo cinco efectivos en plena temporada. No puede ser. Esto provoca el descontrol del verano y el descontento de los ciudadanos», destacó la portavoz del PP, que también resaltó que, incluso, para poder cubrir los turnos, algunos de los agentes tuvieron que interrumpir sus vacaciones para cubrir el servicio con «horas extras».

Marí puntualizó que «nadie discute» que no se puedan tener vacaciones en verano, pero invitó a Ribas a que dialogue con la plantilla para «buscar fórmulas para compensar que no hagan... o bien que no se acumulen 16 personas a la vez». La popular dijo que si la responsable del área de Gobernación no se veía capaz de sacar adelante un acuerdo por tratar de «imponer su criterio», el alcalde podía escoger a otra persona para negociarlo.

A la primera teniente de alcalde no le gustó nada la argumentación de la exalcaldesa del PP, a la que, irónicamente, le advirtió lo siguiente: «Pueden decir que tengo mala leche y soy poco dialogante, pero lecciones pocas». Ribas explicó que la plantilla fija de la Policía Local es de 39 personas, a la que se suman otras 15 contratadas temporalmente (desde el año pasado y por un periodo de tres años), lo cual es «insuficiente». Recordó una vez más que, pese a la necesidad, la Ley Montoro impide al Ayuntamiento contratar más personal.

Unidad mínima de 3 a 5 agentes

Unidad mínima de 3 a 5 agentes

Ribas reconoció que el pasado verano y el anterior hubo más efectivos policiales de vacaciones y que de cara a 2018 se prevé que no sean tantos, aunque aún no se ha hecho a los trabajadores una propuesta, que «lo tienen que aceptar». «Que nadie se crea que no se quiere cubrir bien el servicio», advirtió. En este sentido, la segunda teniente de alcalde recordó que el año pasado se modificó la unidad mínima de servicio, que pasó de tres a cinco agentes. «En muchas épocas del año, había una persona en el retén y sólo una patrulla [de dos agentes]. Si cinco nos parece ahora una cosa espantosa por escaso, hasta hace poco eran tres. No son suficientes, ni 25, pero nos permiten cubrir los servicios con cierta dignidad», justificó.

También explicó que, en junio de 2015, cuando se produjo el cambio de gobierno, comprobó que el PP había pactado con los agentes periodos de trabajo de siete días seguidos y otros cinco de libranza en verano y que pese a que «les sobraban un montón de días libres, no se restaban de sus vacaciones». «Y alegría en el bar», apostilló. En 2016 se cambió.

Del mismo modo, Ribas reveló que tras el pago de las nóminas de mayo de 2015, el gobierno del PP ya se había gastado más de 60.000 euros (de un total anual de algo más de 100.000 euros que se ha utilizado «toda la vida») en el pago de horas extra a la Policía Local. «No sé en qué se lo habían gastado si ahora defienden que en invierno se tienen que hacer las vacaciones. No es lo que tocaba», recalcó, al tiempo que puntualizó que las horas extras «no se tienen que hacer [obligatoriamente], sino que se pueden hacer [son voluntarias]. «No se obliga a nadie a que interrumpa sus vacaciones para hacer horas extra», agregó Ribas.