La Policía Nacional detuvo el pasado 19 de julio en el aeropuerto de Barcelona a cuatro personas (no a dos como informó ayer la Jefatura Superior de Policía de Baleares) por robar dos relojes de alta gama en Ibiza.
Los hechos denunciados en la comisaría de Ibiza ocurrieron el pasado día 18 de julio a las 16.30 y las 23:30 horas, en Vila, según informó ayer la Jefatura Superior de Policía en una nota. Las primeras investigaciones desvelaron que el modus operandi utilizado es el característico de las llamadas 'bandas del Rolex' que, año tras año, se trasladan a la isla «atraídas por el turismo de alto nivel adquisitivo que lo visita».
La banda estaba integrada por cuatro o más personas y tenía una gran movilidad, ya que se desplazaba a la isla y a otros destinos turísticos varias veces durante la época estival, pero permanecía muy poco tiempo en los lugares escogidos para cometer sus delitos. Dentro del grupo había un evidente reparto de tareas: una persona que a principios de temporada visitaba la isla y fijaba la infraestructura del grupo (alquiler de vehículos, alojamientos, desplazamientos, etc) y otra u otras que escogían a las potenciales víctimas en determinados locales.
Por último, la banda se completaba con un grupo formado por al menos cuatro personas que usaban motocicletas tipo scooter de las que, cuando llega el momento oportuno, desciende uno de los dos individuos para apoderarse del reloj y volver a la moto emprendiendo la huida. Además, disponían de un apoyo en las proximidades del lugar de actuación para hacerle entrega del reloj sustraído con lo que, aunque fueran interceptados por la policía, no se les intervendría ningún objeto.
En los casos resueltos por la Policía Nacional los agentes tuvieron conocimiento de la motocicleta empleada en uno de los delitos, al verse implicada en un pequeño accidente. A raíz de la información obtenida, se pudo hacer un seguimiento de los individuos relacionados con la misma para conocer sus pasos en Ibiza y se detectó que habían llegado a la isla el 17 de julio y que se marcharon dos días después a Barcelona, por lo que la Udyco contactó con la comisaría del aeropuerto de El Prat para informar sobre estos hechos. Mientras esperaban tomar un vuelo hacia Italia fueron identificados por funcionarios de la Policía Nacional, quienes procedieron a su detención. En el arresto, uno de los sospechosos llevaba puesto uno de los dos relojes denunciados.
