No había tenido aún la oportunidad de conocer el Centre Creació Jove de la calle Castilla de Vila. Lo hice hace unos días por el pretexto de la exposición y certamen escolar ´Comics and Roll´, abierta al público hasta el día 31. Iniciativa simpática en la que vi algunas cosas interesantes, a pesar de que uno, supongo que por edad y educación, no sea muy aficionado a un género de notable tirón entre generaciones más jóvenes y con autores consagrados de mérito que se mueven con soltura y éxito en ámbitos internacionales.

La excusa de la visita me permitió enterarme de la amplia programación que este espacio municipal tiene para motivar la creación joven de la isla, intención bien loable y necesaria, desde luego. Propuestas que va desde talleres artísticos hasta un cinefórum, varios tipos de baile, teatro, conciertos, cursos de fotografía, dibujo y pintura... y hasta una semana de cultura japonesa. Algunas actividades son gratis y otras de pago a precios modestos. Hablando con una chica que informa a la gente, me contó que esta VilaJove está calando poco a poco, y no sólo entre los jóvenes, porque la oferta está abierta a todos. Pues me alegro, y ojalá que la sugerente iniciativa no se malogre. Toco madera.

Para los muchos amantes del jazz que hay en la isla ha sido un palo la muerte de José Carlos Cifuentes, ´Cifu´, a los 74 años y por culpa de un ictus. Un personaje singular y entrañable al que varias generaciones debemos la afición por un género musical que, desde su cálido gusto pedagógico, supo como nadie potenciar y difundir en un país que no suele destacar gran cosa por su sensibilidad artística.

Cómo no recordar, pues, su extraordinario programa de TVE 'Jazz entre amigos', emitido entre 1984 y 1991, que uno procuraba no perderse nunca; o sus espacios en Radio 3 y Radio Clásica de RNE; y, sobre todo, conocerle personalmente en los primeros años de la Mostra de Jazz de Ibiza, que presentó algún tiempo cuando aún era concurso.

Siempre con ese aire de buscada complicidad con el aficionado, con aquella ironía amable en la que ponía sus oportunos puntos sobre las íes, su ternura mal disimulada y su fino sentido del humor. Una pérdida notable. Por eso desde aquí pido que en la próxima edición del Festival de Jazz se rinda al querido ´Cifu´ el homenaje que merece con creces. Feliz banda sonora eterna, maestro.

Sí, un duelo más para la sufrida cultura de esta desquiciada ´piel de toro´, tan castigada (insisto una vez más) por un Gobierno torpe y miope al que sólo le interesa como adorno prescindible o como ´medalla´ de marketing electoral. Un país, por cierto, que la respeta más bien poco, como ponen de relieve datos tan escandalosos como el que escuché hace poco: el 88% de los productos culturales (música, cine, literatura...) que se consumen en España por Internet se bajan de forma ilegal.

Para echarse a llorar ante tal robo a click armado contra la creatividad, que a este paso no habrá quien la mantenga, porque la gente de la cultura también come y el amor al arte no alimenta el cuerpo, sólo al espíritu. Así no es de extrañar, ay, que una tienda de discos tan importante en la isla como M-15 haya tenido que cerrar; y que la otra grande, Delta, no venda ya discos desde hace varios años. Otra pena cultural más, y ya van demasiadas. Con un abrazo de pesar al amigo Gianfranco Galusi, que tanto sabe de música y tan amablemente asesoraba a los aficionados.

Pero ya está bien de disgustos, ahora que Ibiza despierta a la primavera y las ganas de vivir crecen con ganas. Por eso, en el último apunte, que dedico a recomendar un libro, traigo un trabajo que he leído con gusto: ´El arte de la fuga´ (Periférica), del reconocido poeta ibicenco, y cada vez más narrador, Vicente Valero. Un trabajo que incluye tres narraciones breves en torno a algún episodio destacado en la biografía de tres poetas europeos importantes: el español San Juan de la Cruz, el alemán Friedrich Hölderlin y el portugués Fernando Pessoa.

Con un lenguaje depurado y un estilo que evoca los mundos creativos de los propios autores, servido con un ritmo sintáctico musical que empuja al lector a entender mejor la ´fuga´ en cuestión, el escritor ibicenco nos hace cómplices literarios de los tres significativos episodios novelados de la vida y obra de los autores elegidos, claves para la evolución de la poesía y maestros por los que siento desde hace muchos años una devota admiración; sobre todo por el primero y el tercero, sin dejar de reconocer por eso la gran altura de Hölderlin, por supuesto. Un buen regalo para el próximo Sant Jordi.