Las obras del nuevo hospital de Can Misses continúan al ritmo previsto pese al hallazgo de algunos restos arqueológicos en el solar, que podrían pertenecer a un antiguo camino y zanjas de cultivo de viñas, además de piezas cerámicas. Los hallazgos están siendo estudiados y documentados mientras los trabajos de remoción de tierras continúan en otras partes del terreno.

La consellera de Patrimonio del Consell, Marga Torres, aseguró ayer que, en principio, «son restos que no tienen por qué significar una ralentización de las obras. Hace un año y medio se hicieron los sondeos previos y lo que se ha encontrado es lo que ya se había visto entonces. Los informes pasarán por la ponencia de Patrimonio y la Ciothupa, las obras continuarán y se seguirá informando sobre todo lo que vaya apareciendo».

«No habrá retrasos»

Por su parte, fuentes del Ib-Salut informaron de que lo que se ha hallado hasta el momento «no tiene la suficiente relevancia como para paralizar la obra. No es ningún monumento. Es una hilera de piedras que parece que marca un camino y que se está estudiando. Las zanjas de cultivo son como las que se pueden encontrar en muchos otros puntos de la isla. Todo será documentado».

Este hallazgo, según las fuentes citadas, no va a ocasionar retrasos: «Se está trabajando en otra parte, porque el solar es lo suficientemente amplio como para seguir sin que haya ningún problema y hay ya una parte muy grande que está totalmente liberada y en la que se puede trabajar sin miedo a estropear nada de valor».

La empresa encargada del seguimiento de las obras, Arqueociencia, la misma que hizo los sondeos previos, tiene trabajando sobre el terreno a dos arqueólogos inspeccionando todas las zonas que están siendo removidas. «Es un seguimiento rutinario que comenzamos en el mismo momento de empezar la remoción de tierras y que seguirá hasta que terminen, lo que puede llevar varios meses», aseguró ayer un responsable de la empresa.

«Estamos poniendo todos los medios necesarios para no influir en el ritmo de los trabajos –dijo el responsable–, están trabajando dos personas y si es necesario pondremos a tres, aunque de momento no hace falta».

La única estructura hallada, el murete de piedra que marca el camino, está en muy malas condiciones, casi a nivel de cimientos, porque el terreno está muy trillado: «Estamos estudiando el alcance de la estructura y aún es muy pronto para determinar su antigüedad», según el portavoz de Arqueociencia, aunque podría tratarse de una construcción del siglo I o II antes de Cristo, de época tardopúnica o romana. Todos los hallazgos afectan a menos de un 25 por ciento del solar.