El Consell pretende limitar el acceso del tráfico de vehículos privados a algunas zonas de la costa que se colapsan, como Benirràs, Platges de Comte o Cala d´Hort, aplicando el modelo implantado este verano en Cala Salada. De todos modos, la consellera de Territorio y Movilidad, Pepa Costa, puntualiza que cada caso tiene unas peculiaridades propias, por lo que hay que buscar soluciones específicas. Así, aparte de ofrecer un servicio de autobús para acceder a las playas, se deben considerar otras opciones, como el traslado por mar, según Marí. También se está trabajando en «un sistema de cuenteo» que permita que se restrinja el acceso en coche una vez que los aparcamientos que se habiliten cerca de la costa estén llenos. Para ello, los posibles usuarios deberán recibir con antelación la información sobre el estado del aparcamiento. Marí asegura que los ayuntamientos son receptivos a estudiar estas medidas.
