Para hacer frente a un año histórico, dos nuevos ases para la manga de Toni Gino. El Pachá Ibiza Voley presentó ayer a sus dos nuevas incorporaciones para la primera campaña de la historia del club en Superliga 2. Estrenando photo-call y templando la voz para la primera rueda de prensa de la temporada, Javier Escandell, presidente del CV Eivissa, y Juanan Ripoll, secretario técnico de la entidad, dieron a conocer a dos nuevos rostros muy ilusionantes: el colocador Jesús Ariño y el receptor Antonio Moreno.

Ambos vienen de tierras donde el voleibol es casi religión. Y los dos cuentan con sobrada experiencia en Superliga, pese a contar Ariño con 25 y Moreno con 26 años. El colocador turolense tiene un impresionante palmarés con el CAI Teruel en el que destacan dos títulos nacionales, una Supercopa. Ahora, los 190 centímetros del aragonés se ponen al servicio del Pachá para sentirse «importante».

Por su parte, Moreno, más parco en palabras que su nuevo compañero, también ha militado en la escuadra de su patria chica, el potente Unicaja Almería, y llega a la isla tras un periplo en el Palma Voley con ganas de hacer más afilado si cabe el ataque vilero. «Es en lo que más destaco. Voy a trabajar mucho en un proyecto que espero que sea largo e ilusionante», comentó el andaluz.

Con los 60.000 euros pactados con Illesport la temporada pasada pendientes de cobrar, el cuadro ibicenco ha tenido que ingeniárselas para poder reforzarse con dos hombres contrastados. «El apoyo de Pachá ha sido esencial», destacó Escandell, mientras que Ripoll aseguró que Ariño y Montero han hecho «un esfuerzo en las condiciones para poder venir».

Atento y reflexivo, el técnico Toni Gino se atusaba la barba mientras presenciaba la presentación en un discreto segundo plano. El argentino sabe que tiene un mes por delante (el 15 de octubre debutan a domicilio en Lugo) para encajar estas dos nuevas piezas maestras en ese puzzle cargado de buen rollo que es su plantilla.