Los dos gigantes de Internet anunciaron hoy, lunes, que Eric Schmidt, consejero delegado de Google, abandonará su puesto en el consejo de administración de Apple debido a que las dos compañías compiten cada vez en más aspectos.

"A medida que Google entra en un mayor número de áreas de negocio básicas para Apple, con Android y Chrome OS, la eficiencia de Schmidt como miembro del consejo se verá reducida significativamente", dijo Steve Jobs, consejero delegado de Apple, en un comunicado.

Android, un sistema operativo para móviles impulsado por Google, compite directamente con el iPhone de Apple, por lo que Schmidt debe ausentarse de las reuniones sobre estos temas.

El problema se ha acentuado desde que Google anunciara hace algunos meses el próximo lanzamiento de Chrome OS, un sistema operativo para ordenadores que no sólo competirá con Windows de Microsoft sino también con los productos de Apple.

Schmidt pertenecía al consejo de administración de Apple desde 2006, cuando las dos empresas se convirtieron en aliadas contra el enemigo común, Microsoft, y Apple introdujo Google como buscador de Internet estándar en su sistema operativo.

Pero muchas cosas han cambiado desde entonces en el sector tecnológico. Apple introducía en 2007 el exitoso iPhone y entraba en el negocio de la telefonía móvil, algo que imitaría Google poco después con el sistema operativo Android.

Sin embargo, la principal diferencia entre ambos gigantes es su concepto de software.

Google quiere convertirse en el rey de las aplicaciones basadas en la red totalmente independientes del ordenador. Apple, por su parte, obtiene buena parte de sus ingresos gracias al software de pago que se instala en una computadora concreta.

Programas de Google como Google Docs o Gmail, cada vez más populares incluso entre empresas, no sólo compiten con el software de Microsoft sino también con aplicaciones para los ordenadores Mac. Y, si Chrome OS tiene éxito, ni siquiera el sistema operativo será necesario.

Entre ambas empresas ha surgido además en las últimas semanas otro motivo de disputa aunque, por supuesto, ninguna de las dos lo ha reconocido al anunciar la marcha de Schmidt del consejo de administración de Apple.

Apple decidió recientemente denegar la introducción de Google Voice, el servicio de telefonía por Internet de Google, como aplicación para el iPhone, pues permitiría hacer llamadas gratuitas a través de la red sin usar los servicios de AT&T, operadora exclusiva del iPhone en EEUU.

La Comisión Federal de las Comunicaciones de EEUU (FCC en sus siglas en inglés) anunció el viernes la apertura de una investigación sobre este asunto que, en la práctica, estudiará el férreo control de Apple sobre las aplicaciones que se ofrecen en el iPhone en general.

Las autoridades de defensa de la competencia estadounidenses, en este caso del Ministerio de Justicia, ya tenían a las dos compañías en su punto de mira por la existencia de directivos con presencia en ambos consejos de administración.

Con la marcha de Schmidt el problema queda prácticamente zanjado, pero Art Levinson, ex-consejero delegado de la firma farmacéutica Genentech, aún pertenece tanto al consejo de Google como al de Apple y ninguna de las dos compañías ha aclarado qué ocurrirá con su puesto.