Adiós a las prendas que te quedan pequeñas: Esto es lo que tienes que hacer para que tu ropa encogida vuelva a su tamaño normal

Esto es lo que tienes que hacer

Adiós a las prendas que te quedan pequeñas: Esto es lo que tienes que hacer para que tu ropa encogida vuelva a su tamaño normal

Adiós a las prendas que te quedan pequeñas: Esto es lo que tienes que hacer para que tu ropa encogida vuelva a su tamaño normal

Valeria Montero

Muy pocas cosas dan más rabia que comprar una prenda de ropa que termine quedando pequeña después de pasar por la lavadora. El proceso de lavado que en teoría tendría que devolverle a la ropa su confortabilidad puede volverse totalmente en nuestra contra si no hemos leído bien la etiqueta de nuestras prendas.

No siempre el problema es nuestro. Muchas veces la ropa termina encogiéndose por una mera cuestión de funcionamiento de nuestro electrodoméstico: los movimientos del tambor y el calor al que la ropa se somete dentro puede provocar que los tejidos terminen por deteriorarse y pierdan su atractivo original.

Por norma general, las prendas que terminan encogiendo suelen ser de tejidos como el lino, el algodón o la lana. No obstante, hay ciertos métodos que pueden ayudarte a evitar que surjan estos inconvenientes por los que en alguna ocasión habrás tenido que desechar ropa nueva. Para conseguir que los tejidos se encojan, utiliza agua fría y evita los ciclos de lavado demasiado intensos. Si cuentas con ropa delicada para meter en la lavadora, es conveniente que la introduzcas en una bolsa para evitar que se enganche con los salientes del tambor o de otras prendas.

Ropa que no se encoge

Con un buen uso, podrás poner tanto tu lavadora como tu secadora a funcionar a tu favor antes de que sea demasiado tarde. En la secadora también pueden quedarse pequeños prendas como los vaqueros, la ropa deportiva, las camisas, toallas, mantas, sábanas, etc. En primer lugar, ten en cuenta que sobrecargar los tambores de tu lavadora y secadora pueden terminar generando justo el efecto contrario al que buscamos y, en lugar de ponerse a nuestro favor, terminen dejando la ropa sucia y las prendas arrugadas. En este caso, podrán encogerse debido a que la temperatura aumenta.

También juega un importante papel el estado del filtro. Si tu lavadora o secadora cuentan con algún rincón sucio, harán el efecto contrario en tu colada y te costará mucho más trabajo lavarla. Por otro lado, y aunque te parezca incluso un gasto de energía, lo cierto es que si haces dos tandas de secado seguidas estarás aprovechando el calor que genera la primera.

El suavizante también es un aliado fundamental tanto para proporcionarle un rico aroma a tu ropa como para dotarla de más flexibilidad; algo que además reducirá las arrugas. Eso sí, intenta que las prendas que laves sean todas del mismo tejido.

Devolverle el aspecto original a tu ropa

Es posible que, pese a seguir todos estos consejos, sigas encontrando tu ropa encogida. No tires la toalla; hay un método gracias al que podrás devolverle su aspecto original. Recuperar tus jerséis es mucho más simple de lo que piensas; tan solo tendrás que:

  • Sumergirlo en una mezcla de agua, acondicionador para el pelo y vinagre de limpieza
  • Empapar bien la prenda y dejarla sumergida durante una hora
  • Cambiar el agua y añade un chorro de vinagre
  • Estirar la prenda poco a poco dentro del agua mientras la aclaras
  • Dejarla secar

Con la llegada del verano, lo más conveniente es que le des tregua a la secadora y aproveches el sol para tender la ropa al aire libre. De esta forma, te ahorrarás dinero en la factura de la luz y un posible disgusto.