Bufandas antiestrés: el ingenioso producto de Lidl con el que tu espalda quedará como nueva

El estrés del día a día y las jornadas extenuantes de trabajo terminan manifestándose de manera física. Las contracturas y los dolores de espalda suelen pasar factura tarde o temprano a nuestra rutina y terminan teniendo efectos más molestos como, por ejemplo, el dolor de cabeza, los mareos o los calambres.

Por eso, es conveniente que de vez en cuando acudamos a algún especialista en el que podamos tratarnos de los dolores antes de que el problema se vaya agravando. El cuidado de uno mismo es fundamental para mantener una buena salud y es imprescindible dedicar unos ratos al día para escuchar a tu cuerpo y sus necesidades.

Para aliviar la tensión muscular muchas veces no necesitarás nada más que tus propias manos. La tensión muscular que genera la jornada laboral, sumada a la conciliación y otra serie de factores inevitables en la vida de cualquier persona, tienen varias maneras de paliarse. Eso sí, no siempre se necesita a otra persona para recibir un masaje o aliviar el estrés acumulado.

Bufandas especiales

Muchos de los métodos más efectivos

pasan, bien por aplicar calor sobre la zona, o bien por recibir un masaje en las contracturas. En este caso, por ejemplo, Lidl cuenta con una solución que puedes llevar a todas partes y que además hará el trabajo por ti.

Se trata de una almohadilla eléctrica con una potencia de hasta cien vatios. Se trata de un artículo que puedes llevar puesto en el cuello y que es ideal para aplicar calor en tres zonas específicas: cuello, hombros y espalda. Para colocarla, tan solo debes abotonar la parte posterior y quedará similar a una bufanda.

La solución de Lidl, además de aliviar tensiones y relajar el cuerpo, te dará calor durante los meses más fríos del año. La página web ha puesto en descuento el producto y ahora cuenta con una rebaja del 57%. Su precio, que antes era de 59,49 euros, ahora está en los 24,99 euros.

El calor siempre es una buena alternativa para aliviar el dolo, ya que provoca que los músculos se relajen gracias a su efecto analgésico. Por eso, productos como las mantas eléctricas son muy útiles cuando el dolor está empezando. No obstante, si el problema persiste, lo mejor es acudir a un profesional. En cuanto al tiempo que debemos exponer la contractura al calor, es recomendable hacerlo durante quince minutos cada dos horas.

La ventaja

de contar con artículos como las almohadillas eléctricas es que la piel no queda directamente expuesta al calor, así que evitarás que se formen rojeces o que la zona se irrite e incluso se queme.

Masajes en casa

Si con el calor no es suficiente y

quieres encontrar una manera

de deshacer los nudos, lo mejor es que optes por un masaje. Existen ciertas soluciones caseras para salir del paso cuando no contamos con la ayuda de los demás. Tan solo tendrás que hacerte con una pelota de tenis o de ping-pong y ponértela en la zona donde las contracturas estén acumuladas.

Después, mueve la espalda de arriba a abajo presionando levemente para notar cómo la espalda se destensa poco a poco.