Rescate milagroso en la piscina de un hotel de una madre y de su hijo

El hermano mayor quedó en estado de shock

Los dos semiahogados fueron reanimados por varios clientes

Piscina del hotel Gran Fiesta de la Platja de Palma donde se produjo el rescate milagroso.

Piscina del hotel Gran Fiesta de la Platja de Palma donde se produjo el rescate milagroso.

Lorenzo Marina

Un rescate milagroso de una madre y de su hijo menor, ambos vietnamitas, a punto de ahogarse se vivió la tarde del lunes en la piscina del hotel Gran Fiesta de la Platja de Palma. Un niño de seis años se lanzó al agua. Al verlo flotando, la progenitora se zambulló sin saber nadar. Otro tanto hizo el hermano mayor. El socorrista ya había terminado su jornada y numerosos carteles así lo advertían, pero varios clientes los sacaron del agua y los reanimaron de los claros síntomas de ahogamiento que presentaban.

Los hechos ocurrieron sobre las 18.20 horas del lunes en dicho establecimiento hotelero de la Platja de Palma. Numerosos carteles advertían de que ya no había socorrista. Pero un niño de seis años aprovechó un descuido de su madre para lanzarse al agua.

Nada más verlo flotando en la piscina, su progenitora, de 38 años, se zambulló sin saber nadar. Tampoco pudo salir a la superficie y se fue al fondo con el pequeño. Mientras tanto, el padre estaba en el interior calentando comida para su hijo.

«El hijo mayor, de nueve años, vio a su madre y a su hermano en el fondo y entró en estado de shock», precisaron desde el establecimiento hotelero. Los testigos que presenciaron la escena reaccionaron de inmediato. «Los niños y la madre convulsionaban», indicaron. Nada más tener conocimiento de lo ocurrido, desde el hotel llamaron a los servicios de emergencia.

Al parecer tanto el hijo menor como su madre convulsionaban al salir del agua y entraron en parada cardiorrespiratoria. Un hombre de los allí presentes realizó maniobras de reanimación cardiopulmonar al niño de corta edad, que estaba amoratado y no respondía. Una agente de la policía nacional fuera de servicio trató de reactivar las constantes vitales del pequeño.

Asimismo, una mujer se identificó como médica y prosiguió con los ejercicios de resucitación. Esta se centró en tratar de restaurar los signos vitales de la madre. La rápida respuesta de estas personas resultó providencial. Mientras que desde el hotel seguían en contacto con los servicios de emergencia. «Tardaron poco más de diez minutos en llegar», indicó ayer Laura Pocoví, subdirectora del establecimiento.

Estado menos grave

En torno a las 18.35 horas, las asistencias sanitarias del Ib-salut se personaron en el establecimiento hotelero de la Platja de Palma en dos UVI móviles. Los facultativos se centraron en tratar de estabilizar las constantes vitales de madre e hijo, ya que ambos recobraron el pulso.

Los esfuerzos de las personas que les habían sacado del agua habían surtido el suficiente efecto. Hasta el punto de que el personal sanitario consideró que su estado ya era menos grave después de haberse recuperado del ahogamiento.

Tanto la madre como su hijo menor fueron trasladados en las respectivas UVI móviles poco después. El pequeño recibió el alta hospitalaria poco después y la progenitora quedó en observación