Exploración espacial

España emprende una carrera para "cerrar el círculo" entre el diseño, la fabricación y el lanzamiento de satélites

El Gobierno moviliza 4.500 millones de euros para proyectos espaciales tan ambiciosos como la construcción del primer lanzador de satélites español, que estará listo en 2025

El diseño del futuro Miura 5

El diseño del futuro Miura 5

Valentina Raffio

La industria aeroespacial española no solo aspira a hacerse más fuerte sino, sobre todo, a ser más independiente. La ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, ha defendido en más de una ocasión la importancia de "cerrar el círculo" para que España pueda diseñar, fabricar y lanzar de forma autónoma satélites espaciales. En estos momentos, son muchas las empresas españolas que destacan en el diseño, la gestión y el uso de datos satelitales. Falta la parte más logística. Es decir, la fabricación y el lanzamiento de estos instrumentos científicos. Para lograr "cerrar el círculo", el Gobierno ha movilizado 4.500 millones de euros para proyectos espaciales tan ambiciosos como, por ejemplo, la construcción el primer lanzador de pequeños satélites 100% fabricado en España.

La tarea es titánica. Sobre todo si tenemos en cuenta que, hasta ahora, apenas existen tecnologías de este tipo desarrolladas en Europa. Hay incluso quien habla de una verdadera "crisis de lanzadores" en el viejo continente. La inmensa mayoría de desarrolladores de satélites y misiones espaciales dependen de grandes empresas como SpaceX o de agencias espaciales de la magnitud de NASA (Estados Unidos), ESA (Europa) o Roscosmos (Rusia) para lanzar sus misiones al espacio. Esto no solo provoca un aumento sustancial en el coste de estos proyectos sino que, además, en muchos casos implica bastantes retrasos en los lanzamientos en sí ya que siempre se depende o de misiones más grandes o de completar la carga de un cohete para planificar el despegue. Por eso mismo, son cada vez más las voces del sector que reclaman disponer de tecnología propia para poder intervenir en todos los pasos del proceso y controlar mejor los tempos.

España está dando pasos cada vez más decididos en este sentido. A finales del año pasado, la empresa ilicitana PLD Space logró lanzar el primer cohete privado 100% español y el primero de su tipo en toda Europa en ser completamente reutilizable. El vehículo, bautizado como Miura, logró completar un vuelo exitoso al tercer intento y, así haciendo, convirtió a España en el décimo país con acceso directo al espacio. A principios de año, la misma empresa fue seleccionada para desarrollar el primer lanzador español de pequeños satélites fabricado en España. "Queremos ser los primeros en Europa en tener esta tecnología de vanguardia", afirmó Morant en una entrevista con El Periódico de Cataluña, del Prensa Ibérica, en la que definió este proyecto como uno de "los más ambiciosos" en los que se ha embarcado hasta ahora el sector espacial español y que cuenta con "una inversión pública sin precedentes" que suma 45 millones de euros.

El Miura 5, que estará listo de cara al año que viene, aspira a ofrecer hasta 30 lanzamientos al año de pequeños satélites

Todo apunta a que el primer lanzador español de microsatélites estará listo en 2025. El proyecto ha sido bautizado como Miura 5, siguiendo la estela de su predecesor, y está ideado para ofrecer hasta 30 lanzamientos al año de pequeños satélites. "El diseño reutilizable garantiza una rápida recuperación, reacondicionamiento y múltiples lanzamientos posteriores. Esto permite reducir el coste de fabricación y logística, lo que se traduce en una cadencia de lanzamiento más elevada y precios de lanzamiento más reducidos", afirman sus creadores sobre el potencial de este futuro lanzador ideado y fabricado en España.

El 'boom' de satélites españoles

El desarrollo de este tipo de proyectos para "ganar autonomía espacial" destaca como una de las grandes reivindicaciones tanto de las empresas como de las instituciones españolas del sector. En los últimos años, de hecho, más allá de la carrera por los lanzadores y cohetes, España también ha lanzado proyectos tan ambiciosos como sus primeros satélites espía. Estos instrumentos también surgieron en su día por la necesidad de disponer de "información autónoma" desde el espacio, algo que quedó patente después de que en 2002 Francia denegara la petición de España de proporcionar imágenes de un satélite galo que sobrevolaba el islote de Perejil durante la famosa invasión de las tierras por parte de Marruecos. Este incidente, según explicaron fuentes de HisdeSat a este diario, fue lo que motivó la construcción del satélite espía Paz.

En los últimos años, España también ha avanzado a pasos agigantados en el diseño y lanzamiento de pequeños satélites para, por ejemplo, mejorar las telecomunicaciones, afinar la observación de la tierra, estudiar los desastres climáticos o por cuestiones relacionadas con la vigilancia y defensa del territorio. La Generalitat de Cataluña, por ejemplo, ya ha lanzado tres (Enxaneta y Minairó, enfocados al 5G; y Menut, de observación de la tierra) y prepara un cuarto para el año próximo. También han sido muchas las universidades como la UPC que se han sumado al reto. Todo apunta a que la 'fiebre' de los satélites españoles irá a más en los próximos años, sobre todo ahora que se está reivindicando el 'poder' de tener acceso directo al espacio.

Suscríbete para seguir leyendo