Un pueblo de Tenerife se rebela contra el cura por destrozar unos frescos de la iglesia declarados Bien de Interés Cultural

Los vecinos exigen medidas contra el párroco por ordenar la desprotección de unas pinturas con tres siglos de historia y pintar sobre ellas, lo que puede causar daños irreparables a este tesoro cultural de la parroquia de San Antonio de Padua

Un operario pinta sobre los frescos de la parroquia de San Antonio de Padua, en El Tanque, por orden del cura.

Un operario pinta sobre los frescos de la parroquia de San Antonio de Padua, en El Tanque, por orden del cura. / EL DÍA

Daniel Millet

Es un caso parecido al del famoso fresco del Ecce Homo de un pueblo de Zaragoza pero en versión tinerfeña y con la particularidad de que en el caso isleño no ha sido una feligresa, sino el cura de la parroquia, el que se ha cargado la obra.

Los vecinos del municipio de El Tanque (2.600 habitantes), en el norte de Tenerife, se han rebelado contra el cura de la parroquia de San Antonio de Padua, Héctor Lunar Guevara, por causar daños a unos frescos protegidos que se encuentran en el presbiterio de la iglesia, declarada Bien de Interés Cultural en 2011.

Los hechos ocurrieron hace cuatro días. Así lo cuenta la Hermandad de Nuestra Señora del Buen Viaje de El Tanque, en una denuncia comunicada por las redes sociales: "Cayó la gota que colmó el vaso. Hoy (por el pasado viernes 8 de marzo) se ha cometido un delito contra el patrimonio histórico de nuestro municipio. El párroco Héctor Luna Guevara ha decidido, siguiendo sus propias normas, raspar y pintar los laterales del presbiterio de la parroquia matriz de San Antonio de Padua, que estaban protegidos con pintura especial y pendientes de restaurar".

La nota de la Hermandad añade: "Lo ha hecho sin conocimiento de la riqueza artística que hay detrás de la pintura blanca, sin permiso de Patrimonio, algo que es obligatorio, ni tampoco el Ayuntamiento tenía conocimiento de ello".

Esta Hermandad, la Asociación de Vecinos Nuestra Señora del Buen Viaje y otros colectivos sociales de El Tanque han pedido al Obispado de Tenerife que aparte al cura de esta parroquia y han trasladado los hechos al Ayuntamiento para que adopte las correspondientes medidas.

A diferencia del caso de hace 12 años de la señora del pueblo de Borja Cecilia Giménez, que intentó arreglar el fresco de Ecce Homo y lo terminó destrozando, en este de Tenerife lo que ha ocurrido es que el cura mandó a una empresa no especializada a retirar una protección de pintura plástica de los frescos de San Antonio de Padua, colocada precisamente para proteger las pinturas.

Iglesia de San Antonio de Padua, en el municipio de El Tanque, en el norte de Tenerife.

Iglesia de San Antonio de Padua, en el municipio de El Tanque, en el norte de Tenerife. / EL DÍA

Y ya no solo ordenó la retirada de esta capa protectora, que permanecería hasta que se rehabilitaran esos frescos, sino que les dijo a los operarios que pusieran encima una capa de pintura convencional blanca.

La alcaldesa de El Tanque, Esther Morales, confirma que esta nueva capa de pintura convencional ha causado daños a los frescos, cuya gravedad se tratará de determinar ahora. Precisamente este lunes, la alcaldesa recibe la visita de especialistas en patrimonio del Cabildo de Tenerife y del Gobierno de Canarias para determinar si los frescos se pueden rescatar o se han perdido para siempre.

Expertos del Gobierno de Canarias y el Cabildo de Tenerife se desplazan a El Tanque para determinar los daños sufridos por los frescos

"El cura no avisó de esas obras. Esta parroquia es un bien privado pero el Cabildo decidió protegerla declarándola Bien de Interés Cultural por su alto valor cultural e histórico. También tienen un altísimo valor estos frescos del siglo XVIII". Esto detalla Esther Morales, que recuerda que uno de los frescos sí había sido restaurado, en unas obras anteriores en esta parroquia, pero no otros que se encuentran en el presbiterio, es decir, el área del altar mayor hasta el pie de las gradas.

La Hermandad de Nuestra Señora del Buen Viaje asegura que el cura "tampoco se ha tomado la molestia de colocar algo para proteger la madera del suelo como es debido, ni ha protegido las imágenes, algunas más antiguas que la propia parroqui, que data del siglo XVIII".

El cura no avisó de estas obras que han afectado a los frescos del siglo XVIII

Esta actitud del párroco demuestra, para la Hermandad y la Asociación de Vecinos, "su falta de respeto y absoluta ignorancia hacia nuestra historia, nuestra cultura y nuestra riqueza patrimonial, y lo ha hecho sin escrúpulos".

La indignación de los vecinos de El Tanque con este cura viene de atrás, antes de que ordenara estas obras chapuceras sin informarse de los daños que podía causar. Lo apunta la Hermandad. "Llevamos casi dos años sufriendo faltas de respeto por parte de este señor, no sólo hacia los miembros de esta Hermandad, sino también a otros y otras fieles, hacia nuestras costumbres, nuestra cultura... Nosotros que, como Hermandad y como miembros del grupo de la parroquia, llevamos toda la vida cuidando y preservando la iglesia, preparándola para cada acto litúrgico, cuidando que esté limpia, porque al fin y al cabo es nuestra casa, nos hemos dado cuenta de que este señor nos quiere apartar de la parroquia. No merecemos este trato".

La indignación de los vecinos de El Tanque con el cura viene de atrás: lo acusan de faltas de respeto

"Nunca nos hemos querido pronunciar públicamente porque esperábamos que el obispo hiciera caso a las peticiones que le hemos hecho llegar por carta o a través de otras personas, pero ya es hora de que todo el mundo sepa cómo es en realidad Don Héctor", detalla el escrito divulgado por las redes sociales, que concluye: "Desde que llegó a El Tanque no ha hecho más que lo que le ha dado la gana. Hace y deshace a su antojo y se defiende diciendo porque yo soy el párroco. Una persona que debería dar ejemplo de fe, de respeto al prójimo, humildad… es todo lo contrario. Ya estamos cansados".

El Obispado de Tenerife conoce perfectamente la indignación de los vecinos de El Tanque. También ha enviado a expertos para determinar qué daños han sufrido los frescos. La Asociación de Vecinos Nuestra Señora del Buen Viaje espera que aparte a este párroco y se haga cargo de los daños.

Las catas que se van a realizar a los frescos por parte de los técnicos determinarán si se pueden salvar esas pinturas de tres siglos de historia desprotegidas por orden del párroco y cubiertas de un plumazo con pintura blanca convencional.

La Hermandad de Nuestra Señora del Buen Viaje explica en otro enlace de su página de Facebook la importancia que tiene la parroquia de San Antonio de Padua, situada en el casco histórico de El Tanque. Destacan lo siguiente: "Antes de la erupción volcánica de Trevejo en 1706, la zona de lo que ahora conocemos como el casco histórico contaba con una pequeña Ermita, dedicada a San Antonio de Padua (S. XVI). Esa Ermita fue destruida por el volcán, por lo que los pocos vecinos y vecinas que se habían asentado en la zona, construyeron la actual parroquia con sus manos y los pocos recursos que tenían y que se abrió al culto en 1729 (siglo XVIII)".

"Entre los años 1999 y 2007 se llevó a cabo la restauración de la parroquia, en la que se descubrieron unas pinturas en las paredes del presbiterio. Solo se pudo restaurar una franja sobre la puerta de la sacristía, ya que la restauración completa requiere de una gran inversión económica y consentimiento patrimonial, porque la parroquia es un BIC", concluye la Hermandad.