Turismo

Richard Branson en la inauguración del hotel Son Bunyola: "Amo Mallorca y siempre he estado enamorado de la Tramuntana"

El magnate británico rememora que ya hace veinticinco años desde que llegó a esta propiedad, la compró, la vendió y luego la volvió a comprar

Richard Branson en la inauguración de Son Bunyola

Richard Branson en la inauguración de Son Bunyola / MANU MIELNIEZUK

Myriam B. Moneo

"Veinticinco años han pasado", rememoraba este miércoles Richard Branson de la compra, la venta y después la recompra de Son Bunyola, en Banyalbufar (Palma), que inaugurado como uno de sus exclusivos hoteles de Virgin Limited Edition. El magnate británico se dio el gusto de cortar una cinta conmemorativa para inmortalizar el momento. Antes se le declaró a esta isla que conoció de niño viajando con sus padres: "Amo Mallorca y siempre he estado enamorado de la Tramuntana". 

"He tardado tanto en llevar gente al espacio como construir Son Bunyola", dijo medio en broma medio en serio en alusión a que la semana que viene pondrá en marcha un viaje galáctico. Recordó los avatares que ha pasado para sacar adelante el hotel, por la dificultad para conseguir los permisos. "Me enamoré de esta propiedad hace veinticinco años, como me enamoré de Deià hace casi cincuenta años". Lo "positivo" de que le haya costado tanto hacerlo realidad es que se haya conservado el entorno y su costa: "Tenemos que luchar para que se mantenga así".

Al rememorar su relación con Son Bunyola a Sir Richard Branson le falló la memoria. En realidad su historia con la antigua possesió que se ha convertido en un hotel singular de 26 habitaciones y tres villas independientes se remonta a 1994, hace 29 años, cuando se la adquirió a los herederos del empresario de Sóller Josep Puig Canals, como se repasa en el prolijo dosier de prensa repartido tras la rueda de prensa del británico. 

Branson, acompañado por Vincent Padioleau, director del hotel, presentó su proyecto más personal, que no las instalaciones, la excusa fue que ya tiene huéspedes, se abrió la semana pasada, el día 16.

Abrir todo el año

Su intención ha sido crear un hotel en armonía con la naturaleza manteniendo el legado de la histórica finca de Son Bunyola. De hecho, declaró que le hubiera gustado que los dueños originales de la 'possesió' del siglo XVI pudieran ver cómo ha quedado tras su restauración. También, dice Branson, quiere que el lugar sea visitado por los residentes. 

Se marca un objetivo a contracorriente con la Mallorca de temporada: quiere que su hotel esté abierto los doce meses del año, iniciativa a la que cada vez se apunta más los resorts de lujo en la isla. El entorno y las actividades a realizar en Son Bunyola, como hacer senderismo o ciclismo, son un aliciente para lograrlo, confía.

La masificación turística no es un asunto que preocupe al magnate, Mallorca ha logrado "un balance" con el turismo de masas

La masificación turística no es un asunto que preocupe al magnate. Cree que Mallorca ha logrado "mantener un balance entre el turismo de masas" y el de zonas como Banyalbufar. 

De momento, el hotel reunió a parte de la sociedad mallorquina en la fiesta de inauguración de la noche. Carolina Cerezuela y Jaume Anglada se encargaron de poner la música en un concierto para los alrededor de 250 invitados de Branson. Entre ellos, la próxima presidenta del Govern, la ‘popular’ Marga Prohens, Isabel Vidal, la directora de Turismo en funciones, el humorista Agustín Martínez ‘El Casta’, la joyera Mar Aldeguer, Lorenzo Fluxá, el comandante general de Baleares, Fernando Luis Gracia, María Frontera y María José Aguiló, presidenta y vicepresidenta, respectivamente, de la Federación Hotelera, y Jesús Cuartero, presidente de Essentially Mallorca.

"Hemos tardado un poco, pero hoy el sueño de Richard es realidad", declaró Padioleau. Dio las gracias al ayuntamiento de Banyalbufar y sus vecinos y al Consell de Mallorca, entre otros para llevar adelante el hotel.

Alta ocupación

Son Bunyola estima tener esta temporada una ocupación del 70% por ciento, dice su director. Ya hay reservas para los próximos tres meses y la semana que viene el hotel estará completo. El francés Vincent Padioleau, que lleva doce años trabajando con Virgin y antes lo hizo en La Residencia en la época Branson, señaló también que el hotel cuenta con 120 trabajadores, de los cuales el 80% son españoles y la mitad mallorquines. 

Su clientela está compuesta por turistas europeos, con británicos, franceses y alemanes, además de españoles. También Branson confía en que será muy importante el turismo americano y menciona el vuelo directo entre Mallorca y Nueva York, como un gran potencial para su exclusivo hotel.