En tiempos de pandemia, viajar durante el verano en el mismo territorio balear se ha convertido en una de las opciones principales para los mallorquines. A finales de agosto este diario mostraba el «éxodo mallorquín récord -en barco- en el mes de julio hacia Menorca e Ibiza», resultado de diversos factores como la cercanía, la mayor sensación de seguridad con el coronavirus o los bonos turísticos de cien euros que ofrece el Govern para disfrutar en otra de las islas.
Los últimos datos proporcionados por el Institut d’Estadística de Balears (Ibestat) constatan que este verano, de junio a agosto, se ha alcanzado la cuarta mayor cifra de la última década de personas que han viajado desde el aeropuerto de Son Sant Joan hasta Menorca e Ibiza, solo superada por lo alcanzado entre 2017 y 2019, los únicos ejercicios en los que ha habido más de cien mil personas. Este verano, en total, han sido 98.000 los pasajeros que se han desplazado desde Mallorca hasta las otras islas en transporte aéreo. En comparación con 2020, a raíz de la irrupción del coronavirus, este año el dato ha sido un 57% mayor. El récord se produjo hace dos años, cuando se superaron las 127.000 personas.
Si se suman los datos de junio y julio de los viajes en barco y en avión desde Mallorca al resto de Baleares el resultado es el tercer mejor verano histórico: un total de 140 mil locales se han desplazado a las otras islas, solo por detrás de lo ocurrido en los dos cursos anteriores a la pandemia, años en que se sobrepasaron los 160.000 pasajeros. Así, la cifra de 2021 ha sido un 41,25% superior a la del año pasado, cuando se truncó la tendencia ascendente de los ejercicios anteriores a causa del coronavirus.
Diferencia por islas
Si se observa por islas, sorprende la clara diferencia entre el transporte aéreo y marítimo. Entre junio y agosto ha habido un 37,5% menos de mallorquines que han viajado en avión a Menorca, comparado con los datos de Ibiza. Sin embargo, la cifra de locales que se desplazaron en barco a la isla Pitiusa es un 44% menor que la llegada a los puertos menorquines.
Aun así, cabe destacar que hasta el 2014 Ibiza tenía prácticamente el monopolio de mallorquines tanto en el desplazamiento aéreo como en el marítimo, pero desde ese año Menorca ha cogido un gran protagonismo con el turismo venido desde Mallorca en barco
