La consellera balear de Sanidad, Patricia Gómez, acaba de anunciar que se suspende la vacunación masiva en todas las islas. La causa son los casos que se han detectado en España de reacciones adversas a dosis de la vacuna facilitada por AstraZeneca, que es la que se está inoculando en Balears. La decisión se ha adoptado en el marco del Consejo Interterritorial de Salud extraordinario convocado esta tarde de urgencia por el Ministerio de Sanidad, y tiene efectos inmediatos. Gómez ha reconocido que alcanzar la vacunación del 70 por ciento de la población antes del verano "es una incógnita".

La noticia se ha hecho pública poco después de que el Ministerio de Sanidad haya decidido suspender la inoculación del antídoto británico, tal y como ya han hecho otros países europeos como Francia, Alemania, Italia y Dinamarca, entre otros.

La consellera ha explicado la paralización es temporal y que no se sabe "si será cuestión de días o de semanas"

En una rueda de prensa junto al director general del Servicio de Salud, Juli Fuster, tras la reunión urgente del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud que ha acordado la suspensión de la vacunación con AstraZeneca, la consellera ha explicado la paralización es temporal y que no se sabe "si será cuestión de días o de semanas".

Fuster, por su parte, ha explicado que a partir de ahora la actividad de vacunación masiva en las instalaciones deportivas en las que había comenzado se paraliza y que continuará en los centros de salud, con la inmunización de los mayores de 80 años, que no recibirán la vacuna de AstraZeneca y sí dosis de Pfizer o Moderna

Gómez ha explicado que la decisión de la suspensión se ha tomado "por prudencia" y tras la aparición -aunque en porcentajes "muy bajos"- de efectos secundarios graves que no estaban descritos en la ficha técnica.

Ahora, han explicado, se están estudiando los casos para determinar si existe o no relación con la administración de la vacuna.

España se ha sumado esta tarde a la veintena de países europeos que han suspendido la administración de la vacuna de AstraZenaca por precaución ante la posibilidad de que pueda estar detrás de varios casos de trombosis graves. La decisión se ha tomado en la reunión del Consejo Interterritorial de Salud convocada esta tarde de urgencia por el Ministerio de Sanidad.

El recinto ferial de Ibiza, en Ibiza, y el Hospital de Formentera, han acogido desde hoy la vacunación masiva de personas nacidas en 1966 (se han inoculado 200 dosis), un proceso que queda ahora en suspenso.

La vacuna fabricada y distribuida por AstraZeneca se ha inoculado ya en Ibiza y Formentera a los agentes de los cuerpos de seguridad y al personal docente.