El Ayuntamiento de Sant Josep prevé cubrir con placas solares los 3.000 metros cuadrados del techo del polideportivo de Can Guerxo, aprovechando las obras de remodelación de esta instalación, que deben iniciarse «muy pronto, aprovechando el cierre obligado por la crisis de la Covid-19», informó el Consistorio en una nota.

El departamento de Medio Ambiente considera que «esta es una ubicación idónea», pues la instalación «está ligeramente inclinada hacia el suroeste y no será necesaria la instalación de apoyos para los paneles fotovoltaicos», añade la nota.

A falta de definir el proyecto ejecutivo y los detalles de esta actuación, se estima que tendrá un coste máximo de 450.000 euros. En los próximos meses se llevarán a cabo los proyectos de detalle que permitirán establecer las bases para la licitación.

Instalación reforzada

Instalación reforzada

El polideportivo, añadió el Ayuntamiento, ya cuenta en la actualidad con un pequeño sistema de aprovechamiento de energía solar térmica para la calefacción de agua de las duchas y grifos. «Esta instalación se reforzará ahora con placas solares para la obtención de energía fotovoltaica para autoconsumo del polideportivo y otras que permitirán suministrar energía limpia para inyectar a la red eléctrica», manifestó la concejala de Medio Ambiente, Mónica Fernández, quien recordó que Sant Josep «se ha comprometido a hacer frente a la emergencia climática a la que nos enfrentamos». «Estamos ante una situación que no acepta aplazamientos y que hemos de tener en cuenta en todas las actuaciones del Ayuntamiento», agregó.

Paneles planos

Paneles planos

Ambas instalaciones consistirán en paneles planos sin estructura de apoyo, lo que permitirá reducir el impacto visual de la instalación, así como el propio peso sobre el techo. Además, el hecho de que los paneles se instalen de forma plana permitirá la colocación de más unidades, pese a que se reducirá ligeramente su eficiencia.

La instalación fotovoltaica de autoconsumo consistirá en 36 paneles de 375 Wp (pico de potencia), con una potencia máxima de 13,5 kWp. Con esta instalación se prevé una generación de aproximadamente 20.000 Kwh anuales, la mayor parte de los cuales se podrán aprovechar en el consumo eléctrico de las propias instalaciones.

La instalación fotovoltaica de suministro a la red eléctrica está pensada para reducir la dependencia del municipio respecto a los combustibles fósiles. Consistirá en 1.385 paneles fotovoltaicos de 340 Wp, con una potencia máxima de 470 Wp. Con esta instalación, que ocupa gran parte de la superficie del techo, se prevé generar aproximadamente 700.000 Kwh anuales de energía eléctrica, equivalente al consumo de unos 200 hogares medianos.

La instalación de placas fotovoltaicas en los techos de las instalaciones públicas se ha convertido en una norma cada vez más habitual entre las administraciones públicas, al objeto de potenciar el uso de energías alternativas, reducir costes y obtener energías limpias que poder inyectar a la red eléctrica.