La presidenta del Govern, Francina Armengol, ofreció ayer al presidente del Ejecutivo central, Pedro Sánchez, la posibilidad de que los habitantes de todas las islas, entre ellas Ibiza, puedan salir de su municipio de residencia para hacer deporte sin acogerse a ninguna franja horaria, y mencionó actividades como senderismo o ciclismo: «Es lógico que estas actividades pasen de un municipio a otro», apuntó la presidenta.

Precisamente, Sánchez, tras la reunión telemática con todos los presidentes autonómicos, anunció que la eliminación de las franjas horarias se amplía a los núcleos urbanos hasta de 10.000 habitantes, cuando hasta ahora sólo se podían beneficiar de esta medida los de 5.000. No obstante, la puesta en marcha de esta nueva decisión no tiene una fecha fija, sino que se trata de una orden ministerial que se desarrollará estos próximos días.

En Ibiza (Formentera ya la disfruta desde hace una semana), esta novedad sólo afecta a Cala de Bou, zona que el Ayuntamiento de Sant Josep pidió incluir en la medida que afectaba a los núcleos de hasta 5.000 habitantes para que en todo el municipio no hubiera restricciones para el paseo o hacer deporte. Ahora sólo en Vila (49.783 residentes) y en los núcleos urbanos de Santa Eulària (11.435) y Sant Antoni (20.741) los residentes deben respetar los horarios: de 6 a 10 horas y de 20 a 23 horas para personas de entre 14 y 70 años, de 12 a 19 horas para los menores de 14 años y de 10 a 12 horas y de 19 a 20 horas para los mayores de 70 años y personas dependientes

Aunque según los plazos del desconfinamiento por la crisis les toca, también pidió Armengol al presidente que Ibiza, Mallorca y Menorca pasen el próximo lunes 25 de mayo a la fase 2 del proceso de desescalada, que relaja las restricciones aún más.

Formentera estrena hoy esta etapa, que permite mayor movilidad y aprovechamiento de los establecimientos comerciales y el uso recreativo de las playas, así como el baño, entre otras cosas (más información en la página 5).

Armengol también solicitó a Sánchez, en la reunión virtual con el resto de presidentes autonómicos, que el uso de mascarilla sea obligatorio, no sólo en espacios cerrados sino también públicos por parte de todos los ciudadanos por responsabilidad y como «forma de pedagogía» contra el contagio.

«Hemos pedido que el Gobierno sea más contundente con el uso de la mascarilla y que sea obligatoria no solo en espacios privados sino también en públicos por parte de todos los ciudadanos», dijo Armengol en una rueda de prensa telemática tras reunirse en una videoconferencia con Sánchez y los demás presidentes autonómicos.

«Una forma de pedagogía»

«Una forma de pedagogía»

«Es una forma de pedagogía y de pensar que estamos en una situación que empezamos a desescalar pero que tenemos un virus que es muy contagioso», añadió.

Además, el Govern ha solicitado que en la fase 1 estén autorizados a pasear con los niños padre y madre, y no solo un progenitor como hasta ahora, «ya que juntos pueden ir a una terraza».