«Si las depuradoras funcionan correctamente, ¿por qué el mar está lleno de materia orgánica?». Con esta pregunta, el biólogo Manu San Félix cuestionó la sistemática respuesta del Govern balear cada vez que se produce un vertido de residuos desde una de sus plantas. La flagrante contaminación que produce la estación de Platja d'en Bossa, reflejada en un vídeo grabado por la Alianza por el Agua [y que acompaña esta noticia], así como la respuesta de la conselleria de Medio Ambiente, han levantado una oleada de indignación entre los biólogos y entidades conservacionistas.

San Félix afirmó: «Llevo 27 años viendo, fotografiando y grabando emisarios lanzando mierda al mar, no lo he visto una sola vez». El biólogo consideró que los políticos de la conselleria y los responsables del Abaqua «hablan desde la tranquilidad de un sillón, pero si se pusieran las gafas de bucear y bajaran al mar verían las cosas de otra manera».

Al bucear cerca de los emisarios de las depuradoras «se ven zonas enormes de cianobacterias y algas filamentosas, que es señal evidente de contaminación. Si estos elementos no vienen de las depuradoras, ¿de dónde vienen?», y negó que los vertidos desde los barcos puedan causar por sí solos esta situación.

«Si los emisarios funcionan bien, ¿por qué tenemos tan mala calidad del agua?», se preguntó. Y recordó que el propio emisario de la depuradora de Formentera vierte sobre pradera de posidonia, en pleno Parque Natural y a sólo 300 metros de la costa. «He visto salir de él compresas y bastoncillos para las orejas», relató.

El argumento empleado por el Govern según el cual los análisis periódicos demuestran la corrección de la depuración es desmentido por San Félix: «Esto es como el fumador que va al médico y dice que no fuma nunca, pero resulta que sus pulmones están negros».

«Explicaciones incorrectas»

«Explicaciones incorrectas»

El coordinador de la Alianza por el Agua, Juan Calvo, calificó de «insuficientes» los argumentos del Govern. Negó que la muerte de la posidonia circundante en la zona del emisario se deba a que el caudal vertido sea más dulce que el mar. «Eso es incorrecto. Un emisario que funciona correctamente debe diluir bien el vertido y no emitir ni contaminantes ni agua dulce. Si lo hace, es que funciona mal», aseguró. Además, la demostración más evidente «es la carga de nutrientes que hay en los alrededores, lo que evidencia que el agua está mal depurada».

«Es un caso de libro de sucesión ecológica hacia un sistema más degradado», añadió.

Por su parte, el también biólogo y presidente del Grup d'Estudis de la Naturalesa (GEN), Joan Carles Palerm, refiriéndose a la depuradora de Platja d'en Bossa, consideró «más que evidente que el nivel de depuración no es el correcto y difícilmente se puede justificar diciendo que había que dejar salir el agua de las lluvias».

Depuradoras desfasadas

Depuradoras desfasadas

«No se puede aceptar que se diga que va a empezarse a tramitar la reparación del emisario, lo que se ha de hacer es sustituirlo todo, tanto este como el de Santa Eulària», señaló.

Tanto él como San Félix destacaron la necesidad de implantar la depuración terciaria en las principales plantas de la isla. «En los últimos veinte años se ha multiplicado la capacidad del aeropuerto, del puerto, del hospital y de todas las infraestructuras de la isla, pero de las depuradoras, no», señaló San Félix, para quien lo que está ocurriendo «no es ningún misterio».

Palerm, además, recordó que el propio Govern está haciendo caso omiso a lo que establece su propio Plan Hidrológico de Balears, que prevé la implantación de la depuración terciaria en varias plantas de Ibiza.

También recordaron que este tipo de vertidos contaminantes no son excepcionales, sino que se producen «continuamente» en prácticamente todas las depuradoras de la isla durante los meses de temporada turística.