­Personal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) realizará a finales de esta semana una inspección «extraordinaria» en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Ibiza, según confirmó ayer la secretaria coordinadora del TSJB de las Pitiusas y Menorca, Josefa Juan Marí, que puntualizó que, a su juicio, esta visita no debe verse «como algo negativo», sino que el objetivo será «ayudar y dar pautas para mejorar» aquello que en esa instancia «no hagan correctamente».

La inspección se llevará a cabo entre el jueves y el viernes y, según ha podido saber este diario, no es la primera que se hace al Juzgado de Violencia sobre la Mujer. «Hubo ya una hace unos años», recuerdan fuentes judiciales, que agregan que esta fue de carácter ordinario.

Y es que el CGPJ examina las instancias judiciales del país de manera periódica. «De tanto en tanto vienen a hacer inspecciones presenciales», apunta Juan Marí, que recuerda que en Ibiza hace bastantes años se hacen anualmente y que de un tiempo a esta parte ya no se realizan tantas pues, además, hay cuestiones que se pueden revisar de forma «virtual».

Las causas de la inspección

Juan Marí no pudo especificar por qué el CGPJ realiza esta inspección extraordinaria, si se debe a las anomalías en la tramitación de la causa de Sara Calleja o a los problemas del personal, entre otras circunstancias que han ocurrido en esta instancia. «No sé a raíz de qué viene. Pero cuando el CGPJ tiene demasiadas noticias de un juzgado es más probable» que se lleve a cabo.

No obstante, otras fuentes apuntan directamente a «todas las quejas que se han recibido» relativas al «conflicto entre los funcionarios y la anterior secretaria», las bajas de los trabajadores, «el tema de Sara Calleja» o la sustitución del juez titular durante su ausencia.

Asimismo, apuntan también a la petición que hizo el Parlament balear para que se supervisara el Juzgado de Violencia sobre la Mujer, así como al escrito que remitió el magistrado titular de esta instancia y juez decano, Juan Carlos Torres, en la que exponía los problemas que había y las anomalías que este verano se habían producido y de las que tuvo conocimiento durante su baja médica. «Es por todo este revuelo que ha habido en verano», sostienen las citadas fuentes judiciales, que sin embargo señalan que no es habitual que el CGPJ concrete los motivos.

Para llevar a cabo estos controles, el CGPJ tiene unas «unidades de inspectores» que se reparten por zonas. Lo habitual es que se comunique que se va a hacer la inspección al juzgado en cuestión y que se le pida a este que envíe una serie de documentación sobre los procedimientos que tienen, la situación del personal y demás asuntos para revisarla antes de la visita.

En este sentido, Juan Marí señaló que desde el CGPJ se habían puesto en contacto con ella por si quería «comentar algo», si bien la secretaria coordinadora eludió concretar si había comunicado algo y en caso afirmativo, en qué sentido.

Documentación y entrevistas

Una vez que lleguen a Ibiza los inspectores -se suelen desplazar varios, «dos o tres»-, lo habitual por cómo se desarrollan estos exámenes es que pidan más documentación y procedimientos para revisarlos. «Suelen pedir los [procesos] antiguos, los de jurado y las causas con preso», comenta Juan Marí, que señala que si tienen alguna queja de algún procedimiento en concreto también lo solicitarán. El objetivo es comprobar el desarrollo de los mismos o si se han producido demoras en algún periodo a la hora de tramitar, entre otras cuestiones. En definitiva, se trata de «detectar retrasos, disfunciones», precisa.

Además, los inspectores se entrevistan también con el personal del juzgado, tanto con el juez y el secretario, como con los funcionarios. Ayer el magistrado titular seguía de baja médica y aún no se había incorporado a su puesto. Las fuentes consultadas no tenían información sobre ninguna novedad a este respecto. Tampoco pudieron señalar si, pese a estar de baja, estaría en la inspección del CGPJ.

«Y pasado un tiempo envían un informe y hacen sugerencias» para el funcionamiento, agrega la secretaria coordinadora. En este sentido, Juan Marí insistió en que la inspección se debe «ver de manera positiva, no negativa»: «Es para ayudar, para comprobar que el juzgado funciona bien o no, y si hay alguna cosa que no se hace como se debe, se dan pautas». Eso sí, aclaró que «si los inspectores tienen que pedir responsabilidades, las pedirán». «Pero hay que tomarlo como algo positivo. Es para resolver, si hay, problemas», insistió.

Este periódico trató de contactar ayer con el CGPJ para conocer los motivos de la inspección y demás detalles, pero no fue posible debido a que en Madrid era festivo.