El concejal Juan Daura, que a mediados de junio renunció a todos sus cargos en el gobierno municipal aunque continuando como concejal raso y limitándose a cumplir la disciplina de voto, con la excusa de su jubilación, solicitó el pasado día 17 la baja del PP, según trascendió en las reuniones de la dirección del partido del pasado lunes. Con él, ya son cuatro los ediles que empezaron la legislatura como militantes en el PP y que ya han dejado de serlo. Primero fue el concejal Ignacio Rodrigo, cuya marcha al PREF, abrió la primera crisis en el Ayuntamiento. Posteriormente, hace un año, fue la exalcaldesa Marienna Sánchez-Jáuregui la que abandonó el PP, que ya había iniciado los trámites para expulsarla por haberse negado primero a dimitir y finalmente a entregar su acta de concejala. La semana pasada lo hizo Lina Sansano y, aunque sin anunciarlo, Daura también decidió abandonar el partido.

En declaraciones a este periódico, Daura reconoció a mediados de junio que tiene varias ofertas de distintos partidos políticos de cara a las próximas elecciones, entre ellas la de Proposta per les Illes (PI). «Me llena de orgullo que varios partidos piensen que yo puedo aportar algún grano de arena a su proyecto, pero a todos les he dicho lo mismo: hoy por hoy, no. Mañana ya veremos».

Daura abandonó sus cargos contrariado por la decisión del PP de no ofrecerle sustituir a Sánchez-Jáuregui en la alcaldía y porque últimamente se sentía relegado en el equipo de gobierno de Pilar Marí.