En corto

De aquel verano solo queda la canción

Busco en internet alguna referencia a cierto suceso de hace algo más de un tercio de siglo y no encuentro ni rastro, pese a que entonces tuvo alguna notoriedad. Como ya se ha señalado aquí, los sucesos van perdiendo nitidez y luz en internet hasta oscurecerse casi del todo, conforme yendo hacia atrás bajamos a los sótanos que se inician a mediados de los 90 del siglo XX. Mientras desescalamos los años peldaño a peldaño entramos en otro mundo, el de la historia, en el que no se da cuenta de los hechos con la simple versión del reportero, sino que nos entregamos atados de pies y manos al resultado de la taxidermia de historiador, previo descarnado, rellenado de contexto, aplicación de bálsamos y restitución según receta. Es terrible que el pasado sea tratado de ese modo, pero sirva de consuelo que no es menos infiel el procesado de nuestra memoria. Los hechos son un producto perecedero.

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