En Ibiza hemos llegado a una situación de descontrol absoluto, que es peligrosa e insostenible y que pondrá en tela de juicio todo nuestro futuro turístico y nuestra cohabitación como sociedad.
Fiestas ilegales, en muchas ocasiones en Villas propiedad de residentes de pro, donde cientos y a veces miles de personas, sin el mas mínimo control sanitario se comportan como verdaderos animales descontrolados.
Tiroteos, navajazos, agresiones en la vía publica, robos con violencia, atracos a viviendas y a las personas, multitud de accidentes de tráficos de una inusitada violencia, es decir cada día damos un paso mas firme a ser una isla sin ley ni orden y no olvidemos el COVID sigue ahí.
Que fácil es quejarse… ¿pero que soluciones hay???
Caramba delante de un problema de orden publico, solo puede haber una respuesta, clara sencilla e inequívoca, ORDEN, apliquemos los mecanismos que existen, pero que por alguna razón están sin explotar.
Los Ayuntamientos cuentan con sus ordenanzas municipales y con Policías para establecer un mayor y eficaz control en sus municipios, la mayoría de ellos son conscientes, desconozco como es posible que tras mas de un año de pandemia podamos haber llegado a esta situación de auténtico Farwest.
Consell y Govern, en realidad carecen de recursos ejecutivos eficaces para actuar directamente sobre este absurdo descontrol, pero tienen o deberían tener la fuerza política y moral para exigir de una forma unánime y conjunta una solución de inmediato.
Subdelegación del Gobierno Central, entiendo que como residentes en Ibiza y responsables del control de todas las fuerzas de seguridad de la Isla no pueden ignorar la situación en la cual nos encontramos a 11 de julio, si esto no se soluciona de inmediato, en agosto seremos historia….
Es por ello que como ciudadano les exijo, a unos y otros, que actúen ya de una vez y si faltan medios, o ideas es sencillo o los piden públicamente o dimiten, que es muy sano y eso lo hago extensivo a todos los responsables políticos que siendo conscientes de la situación o no hacen nada o miran para otro lado comiendo buñuelos……
Nuestra Isla, privilegiada, idolatrada, deseada, lo seguirá siendo igual, si vuelve a imperar el sentido común y el orden y sinceramente si alguien piensa que de esta autentica basura se puede sacar algo positivo están muy equivocados.
Caeremos en el olvido, cada día nos parecemos mas a las ciudades tristemente famosas, por su descontrol y que forman parte de la historia.
Ánimo a otros Ibicencos sensatos, para que, de una manera suficientemente clamorosa, sin colores políticos, ni demagogias fáciles, exijan el fin de este absoluto y absurdo descontrol.