Corrupción

El tribunal mantiene libre a Villarejo de forma provisional pese a ser condenado a 19 años

La Fiscalía Anticorrupción y Podemos, que ejerce la acusación popular en la causa, habían pedido su ingreso en prisión de forma preventiva

Villarejo: “Estoy en un combate de boxeo con las dos manos atadas a la espalda”

Agencia ATLAS / Foto: EP

Tono Calleja Flórez | Cristina Gallardo

La Audiencia Nacional ha acordado mantener libre de forma provisional a José Manuel Villarejo tras acudir el comisario a la vista solicitada por la Fiscalía Anticorrupción para valorar su entrada en prisión y la de su socio Rafael Redondo. La comparecencia se ha llevado a cabo tras recibir su primera sentencia condenatoria en la macrocausa 'Tándem', de 19 y 13 años de cárcel, respectivamente.

Tanto la Fiscalía Anticorrupción como Podemos, que ejerce la acusación popular mediante la abogada Marta Flor Núñez, habían pedido su ingreso en prisión de forma preventiva al apreciar riesto de fuga.

Sin embargo, los magistrados de la Sección Cuarta de la Sala Penal imponen a los dos condenados la obligación de comparecer en el juzgado de su domicilio cada quince días y también ante la Audiencia siempre que fueran requeridos, la prohibición de salir del territorio nacional, la retirada de pasaporte y la comunicación de cualquier cambio de domicilio.

No hay riesgo de fuga

La Sala resalta que para acordar el ingreso en prisión no solo se requiere la existencia de una condena elevada, pues esta debe ir acompañada de circunstancias adversas que evidencien un riesgo de fuga. Y en este caso, señala que Villarejo estuvo en prisión desde el 3 de noviembre de 2017 hasta el 3 de marzo de 2021, que ha atendido a todos los llamamientos judiciales y ha comparecido a todas las sesiones del juicio menos aquellas en las que se autorizó su ausencia. Apunta, además, que se personó sin demora en la Secretaría del Tribunal para que se le notificara la sentencia a pesar de que era conocedor del fallo condenatorio.

La Audiencia destaca, además, que Villarejo no fue condenado por un delito de extrema gravedad merecedor de tan severa sanción punitiva, si no que esa condena resulta de la adición de penas impuestas por delitos de encubrimiento y revelación de secretos de empresa y particulares (cuatro) y falsedad en documento mercantil (dos).

En declaraciones a la prensa Villarejo había manifestado que no era lógico que se fugara pues había tenido "un año" para hacerlo, pero que no lo había hecho porque sigue creyendo en la justicia. "Nadie en esa Sala se creía lo de que yo iba a huir. Además, mientras yo esté fuera [de la cárcel] podré ejercer mejor mi derecho de defensa", dijo el alto mando policial, que se dirigió a los fiscales de Anticorrupción como "secta de illuminati"

Antes de entrar a la Audiencia Nacional, el comisario también aprovechó sus declaraciones a los medios de comunicación para lanzar acusaciones sobre la supuesta corrupción en el interior del centro penitenciario de Estremera (Madrid), donde ya cumplió prisión preventiva durante más de tres años.

"Estoy muy tranquilo"

"Sigo creyendo en la justicia y estoy muy traquilo con la decisión del tribunal, dentro de la severidad de las penas ha sido correcto y ha sabido valorar la realidad de mi situación", aseguró para arremeter justo despues contra la Fiscalía Anticorrupción, de la que dice que "solamente pretende conculcar" su derecho de defensa de cara a los próximos juicios que tienen pendientes porque estando dentro no podrá defenderse, ya que no tendrá "ni ordenador".

 "Y todas las torturas físicas y psicológicos que he sufrido dentro ellos las van a encubrir, porque sorprendentemente han sido los fiscales los que han informado siempre que hay una queja en vigilancia penitenciaria", manifestó, para añadir más tarde que sabe que no le tratarán muy bien dentro de prisión porque durante su primera estancia ha denunciado tráfico de drogas y señalado a presos y funcionarios "próximos al director", así como otros manejos en relación con la gestión de los talleres o las comidas en mal estado.

Triunfo del "Estado profundo"

"Por eso si triunfa el Estado profundo no creo que me traten especialmente bien en prisión", prosiguió Villarejo, que indicó que la razón por la que le metieron en la cárcel era porque seguía "hablando con la prensa".

El tribunal lo han integrado los magistrados Ángela Murillo, Juan Francisco Martel y Fermín Echarri. El objetivo de la vista era estudiar las medidas cautelares que cabe imponer una vez que Villarejo ha recibido su primera condena, a 19 años de cárcel por delitos de revelación y descubrimiento de secretos y falsedad documental pero no cohecho, lo que ha rebajado sustancialmente la sanción impuesta respecto de los 83 años que solicitaba inicialmente Anticorrupción.

En este primer juicio por 'Tándem' --una macrocausa formada ya por 47 piezas separadas-- la Audiencia Nacional solo juzgó tres, las relativas a los encargos denominados 'Iron', 'Land' y 'Pintor'.

En 'Iron', se juzgó el espionaje del grupo empresarial de Villarejo, CENYT, a un despacho de abogados especializado en propiedad industrial, Balder, por encargo de otro, Herrero&Asociados, al sospechar este último que los antiguos trabajadores que fundaron el primer bufete le habían robado la base de datos.

En 'Land', se investigó si el entonces comisario había dirigido sus averiguaciones contra el entorno de Luis García-Cereceda, el fallecido dueño de Procisa, la empresa promotora de la urbanización de lujo 'La Finca', por mandato de una de sus hijas, Susana, en el contexto de una pugna familiar por la herencia.

'Pintor' fue el único trabajo de estos tres que Villarejo ejecutó estando ya jubilado de la Policía Nacional. Aquí, cumplió el encargo realizado por los hermanos Juan y Fernando Muñoz Támara para encontrar información de un antiguo socio, Mateo Martín Navarro, y el abogado de este último, el ex juez Francisco Javier Urquía, que les permitiera resolver a su favor un litigio fiscal.