Matteo Salvini, salpicado por un presunto escándalo de corrupción que afecta al hermano y al padre de su novia

Matteo Salvini se puso en pose sujetando un panettone el 25 de diciembre y saludó a sus seguidores en internet con esa instantánea, en la que se le ve junto a su novia, Francesca Verdini. El 1 de enero, el actual ministro de Infraestructuras y líder de la Liga lo volvió a hacer. Ella con un collar dorado colgándole del cuello, él con una elegante chaqueta oscura, sonrieron nuevamente delante de la cámara. Pero esta vez los mensajes sarcásticos y críticos que aparecieron debajo de sus publicaciones fueron incluso más ácidos que de costumbre. "¿Y el resto de la familia Verdini? Ah, es que están bajo arresto domiciliario", se leía en uno de los tantos comentarios del 'post' en Instagram.

Ese día quedó registrado también en redes sociales el revuelo provocado por el último escándalo que ha salpicado al polémico político derechista, cuyas consecuencias aún están por verse. Y es que en el centro de todo no solo está él, sino también ella, novia de Salvini desde 2019, pero sobre todo hermana e hija de Tommaso y Denis Verdini. Desde el pasado 28 de diciembre, por orden de la Fiscalía de Roma, el primero ha sido puesto bajo arresto domiciliario, a la vez de que el segundo, que ya se encontraba cumpliendo por una condena por bancarrota fraudulenta, también está siendo investigado. La razón: la sospecha de los fiscales romanos de que sean responsables, junto a otras seis personas, de haber cometido delitos como corrupción, tráfico ilícito de influencias y la manipulación de subastas públicas para adjudicarse algunos suculentos contratos de ANAS, la entidad estatal que gestiona las autopistas en Italia.

La investigación aún está en curso y a nivel público solo se conoce una parte de la historia. Sin embargo, los hechos filtrados hasta ahora (y, en parte, reconstruidos con detalle por los medios italianos) tienen elementos de guiones ya conocidos en el país transalpino. En el centro de la investigación estaría Inver SRL, una sociedad gestionada por Tommaso Verdini, en calidad de presidente del consejo de administración y propietario del 70% de sus cuotas, aunque Denis, el padre, sería la persona que habría tomado realmente las decisiones más importantes, según se ha divulgado.

Mejores contratos

Junto a otro socio, Verdini sénior y junior habrían favorecido a sus clientes para que obtuvieran los mejores contratos gracias a información confidencial que recibían de al menos tres empleados (también puestos bajo arresto domiciliario) cómplices. A cambio de estos presuntos favores, los funcionarios habrían recibido como promesa ayuda para obtener promociones. Con estos elementos se llevó adelante una investigación que empezó en julio de 2021 y se cerró en abril de 2023.

Problema: ANAS tiene como único socio a Ferrovie dello Stato Italiane, compañía nacional de ferrocarriles de Italia controlada por el Ministerio de Economía, hoy en manos de Giancarlo Giorgetti, también dirigente de la Liga. Pero la vigilancia y el control técnico sobre la gestión de ANAS es competencia del Ministerio de Infraestructuras, cuyo jefe actual es Salvini. Este último, sin embargo, se ha defendido al subrayar que la investigación empezó antes de que él fuera puesto a cargo de esa cartera. Por ello, también rechazó responder a preguntas al respecto en el Parlamento italiano.

Críticas

Una estrategia que, de momento, no le ha permitido esquivar el ciclón de críticas de la oposición. "Es necesario que el Parlamento sepa en qué medida los hechos involucran a ANAS, cuántos y qué contratos, qué medidas se han adoptado para prevenir la corrupción, y cuál es la participación de representantes de las instituciones", ha criticado el diputado de los Cinco Estrellas Federico Cafiero De Raho, exfiscal y exjuez nacional antimafia. Existe "una cuestión política", ha añadido la líder del Partido Democrático, Elly Schlein. 

Inmiscuidos en diversas polémicas ya en los primeros días del año, la Liga y Hermanos de Italia, el partido de Giorgia Meloni, la primera ministra, han optado mayoritariamente por la línea del silencio. Sin embargo, no hay que excluir posibles golpes de escena puesto que Denis Verdini se conoce en Italia por su cercanía al difunto magnate italiano Silvio Berlusconi y ya en noviembre de 2020 recibió una sentencia en firme a 6 años y 10 meses de cárcel al ser considerado culpable de la quiebra de banco Crédito Cooperativo Florentino. Otro caso que, en su momento, dio mucho de qué hablar.