Vivienda | Sanitarios

La falta de vivienda obliga a mantener Ca na Majora como residencia para sanitarios

El espacio se desalojó recientemente, tras dos prórrogas, para que esta primavera comenzara a funcionar como unidad de media estancia para pacientes, sin embargo, dada la situación se mantendrá como residencia

Acceso principal a la futura unidad de media estancia Ca na Majora. | ASEF

Acceso principal a la futura unidad de media estancia Ca na Majora. | ASEF / marta torres molina. Ibiza

Marta Torres Molina

Marta Torres Molina

La puesta en marcha de la unidad de media estancia Ca na Majora, en el Hospital Can Misses, se retrasa de nuevo. El motivo, la falta de vivienda. La intención de la gerencia del Área de Salud de Ibiza y Formentera era poner en marcha este espacio para convalecientes y pacientes con largas recuperaciones esta misma primavera. Sin embargo, ha renunciado a esta opción debido a que vuelve a ser necesaria para alojar a los sanitarios que llegan a la isla para cumplir con su contrato y que se enfrentan a la peliaguda situación de encontrar una vivienda.

La gerencia había desalojado recientemente las dos plantas de Ca na Majora que, hasta el momento, estaban funcionando como una extensión de la residencia para profesionales. El objetivo era poder poner en marcha, cuanto antes, este recurso. Todos los profesionales del Área de Salud que estaban ocupando las habitaciones de este recurso, ubicado en el viejo Can Misses, fueron abandonando el edificio, a petición de la dirección.

El desalojo fue progresivo y se culminó después de hasta dos prórrogas, dada la dificultad para encontrar vivienda en la isla. De hecho, Ca na Majora comenzó a usarse como una extensión de la residencia para profesionales y familiares de pacientes de Formentera precisamente para facilitar la incorporación de nuevos profesionales. En un primer momento, desde la gerencia confiaban en que, una vez finalizada la temporada pasada, a estos sanitarios les resultaría más fácil encontrar vivienda, sin embargo, «a diferencia de otros años», indica la gerencia, eso no fue así, de manera que se pidió a los sanitarios que tenían contrato en vigor con el Área de Salud pitiusa que intentaran buscar una vivienda cuanto antes.

Así, a finales de enero, tras la segunda prórroga, el espacio se quedó libre de huéspedes. La mayoría encontraron otro alojamiento y a los que no lo consiguieron se les pudo reubicar en la residencia propiamente dicha, ubicada en la planta baja del viejo Can Misses, donde antiguamente estaba el servicio de Pediatría. Desde la gerencia insisten en que el objetivo de esta hospedería es ser una solución provisional para sanitarios que acaban de llegar a la isla y que no tienen dónde alojarse, un espacio desde el que, con calma, ya aquí, poder encontrar un alquiler. «Con el contacto personal es mucho más fácil que a través de internet», explican desde la gerencia.

Tras el desalojo de los sanitarios de Ca na Majora, el Área de Salud se disponía a pintar el espacio y adecentarlo, además de acabar de componer los equipos que debían prestar servicio en la unidad. No había una fecha concreta para la puesta en marcha de la unidad, que acumula años de retraso, aunque la intención era hacerlo en breve. En un primer momento la idea era habilitar únicamente la planta baja, en la que hay 15 habitaciones, a la que se sumaría más tarde la primera planta, con otras 16.

En 2020, con la llegada de la pandemia, se adelantó su apertura para acoger a enfermos de covid, especialmente personas mayores o aquellos cuya recuperación se preveía larga. Acabada la pandemia, la idea era recuperar cuanto antes el uso para el que se creó: largas convalecencias. Sin embargo, la necesidad de usarla como alojamiento para sanitarios recién llegados, dada la carencia de profesionales, se impuso. Una situación que vuelve a repetirse ahora, a las puertas de la temporada. Empiezan las contrataciones de refuerzos de verano, que no se desplazarán a la isla si no cuentan con un lugar en el que quedarse, y contar con las habitaciones de Ca na Majora se hace imprescindible. La intención de la gerencia es poder recuperar la reapertura de Ca na Majora como unidad para pacientes acabada la temporada, después del verano.

Residencia para sanitarios

La residencia original para sanitarios y familiares de pacientes desplazados desde Formentera tiene doce habitaciones. Cuartos a los que se suman las habitaciones que se han reabierto en Ca na Majora. Hay que recordar que algunas de las estancias de la residencia original están reservadas para situaciones especiales, de manera que la capacidad para profesionales recién llegados al Área de Salud de Ibiza y Formentera es más reducida.

Dos de las habitaciones, por ejemplo, son para las guardias de los Médicos Internos Residentes (MIR), para que puedan descansar. Otra es de uso exclusivo de familiares de pacientes de Formentera que permanecen ingresados en el Hospital Can Misses, un espacio para dormir y ducharse mientras acompañan a su familiar. Otro de los cuartos se guarda para los médicos del servicio de Hemodinámica, ya que en ocasiones están en la isla desplazados desde Mallorca, como ocurre también con los oncólogos que, desde hace más de un año refuerzan el servicio de Oncología.

En los últimos tiempos han estado alojados en la residencia varios profesionales del Área de Salud pitiusa a la espera de encontrar una vivienda: una enfermera del 061, un médico de Atención Primaria, un internista de Can Misses y también estudiantes de Medicina de la Universitat de les Illes Balears (UIB) que han visitado los servicios de Ginecología, Anestesia y la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).

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