Club Náutico Ibiza: Una herencia que abarca 14 años de historia con «lo bueno y lo malo»

El presidente de la APB asegura que la situación «no es fácil», pero asume su responsabildad

Bea Roselló

Bea Roselló

El presidente de la Autoridad Portuaria de Balears (APB), Jorge Sanz, se mostró claro desde el inicio de su comparecencia al asegurar que uno «hereda todo lo bueno y todo lo malo». «En consecuencia tengo que asumir la responsabilidad y buscar las mejores soluciones con el afán de diálogo y consenso», añadió. Durante su relato explicó que «no es fácil» la situación que se está viviendo, ya que lleva en el cargo poco más de cuatro meses y ha «heredado un dossier de 14 años de contenciosos con el Club Náutico Ibiza». «Y no he participado, pero tengo que asumir mi responsabilidad como presidente y por eso estoy aquí», alegó en referencia a dar explicaciones de cómo se encuentra el concurso y la posición de la APB.

Sanz hizo un relato histórico de cómo se ha llegado a la situación actual, empezando por la primera concesión que se le otorgó al CNI en 1970 para 40 años. Una vez superada esta primera autorización para la gestión de la entidad ibicenca, en 2010 el CNI solicitó una nueva concesión y, junto a la APB, se optó por una solución, a su entender, «buena», como era la «competencia de proyectos». En este caso, solo podrían participar los clubes náuticos, a diferencia del concurso de libre concurrencia, como el que está ahora en vigor, en el que puede participar quien quiera. Tras varios contenciosos interpuestos por el Club Náutico 12 Millas, antiguo licitador, y sentencias que obligaban a la APB a ejecutarlas, se ha visto obligada, «por imperativo legal», a sacar una autorización temporal vía concurso.

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