La cesta básica de la compra se dispara un 21% en un año en Ibiza por la subida del producto fresco

Hace algo más de un año el Gobierno lanzaba la propuesta de una cesta de la compra básica por 30 euros. Una cantidad que hacía reír a los residentes de las Pitiusas, que afirmaban, a pie de supermercado y con las bolsas de la compra repletas de productos de marca blanca, que eso era «imposible». Y, efectivamente, lo era. La situación, poco más de un año después, es aún peor. La cesta de la compra básica se ha disparado un 21,3% en la isla, una subida impulsada, principalmente, por el incremento de los productos frescos.

La cesta que la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y el entonces ministro de Consumo, Alberto Garzón, proponían por 30 euros costaba en Ibiza, tirando de productos de marca blanca y escogiendo la opción más barata de cada producto, un total de 40,8 euros. Un 36% más. Una compra que, en el último año, ha aumentado un 3,8%, ya que los mismos productos cuestan en estos momentos 42,35 euros. La compra ministerial apenas se ha incrementado porque no incluía productos frescos, una de las grandes críticas que se le hicieron en su momento.

Baja el aceite de girasol

Algunos productos, además, han reducido su precio en este tiempo, como el aceite de girasol, que cuesta ahora 1,45 euros el litro, casi la mitad que hace un año, cuando su precio se incrementó como consecuencia de la invasión de Rusia a Ucrania, uno de los principales productores. De hecho, los alimentos que registran un incremento más elevado son, precisamente, las conservas de productos vegetales como los guisantes (23,8%), maíz (25%), champiñones (17,6%) y pimientos (16%).

Mucho más ha subido la cesta de compra que, coincidiendo con el anuncio de los ministros, compuso Diario de Ibiza en esas mismas fechas, incluyendo productos frescos (carne, pescado, frutas y verduras) que sustituían a algunos alimentos que contemplaba la lista del Gobierno (albóndigas de lata, mermelada, refrescos, chocolate y algún producto de limpieza) y cambiando el aceite de girasol por el de oliva, que es el producto que más ha incrementado su precio en el último año.

Pequeñas grandes subidas

Esa lista de la compra costaba, en otoño del año pasado, un total de 43,67 euros, coste que en estos momentos es de 52,98 euros, es decir, un 21,31% más. La subida, de casi diez euros, está motivada, principalmente, por el aceite de oliva. Una botella de litro de un producto medio (ni virgen ni virgen extra) de un grado ha pasado de valer 3,9 euros a 8,15, algo más del doble. Y, aunque la subida no ha sido tan acusada, no es manca tampoco la que se ha producido en otros productos frescos, como el pescado (un 13,9% más el kilo de sardina o bacaladilla), la carne (un 21,4% más cuesta el pollo) y atención a la cebolla, cuyo precio ha pasado de 1,05 euros el kilo a 1,65 (un 57% más). Aunque lo que más se ha disparado es la fruta. La más económica, como la manzana golden o la pera conferencia cuestan ahora entre un 79% y un 87% más que hace un año.

El resto de productos de la lista más o menos se mantienen, o esa es la sensación que da, ya que el precio anda cinco o diez céntimos arriba o abajo, como es el caso de la harina (cinco céntimos menos), el caldo de pollo o la pasta seca (cinco céntimos más) y la sal (diez céntimos más). Sin embargo, al ser productos económicos, el porcentaje de incremento es elevado. Esos diez céntimos más que cuesta el kilo de sal fina (de 0,25 euros a 0,35) supone un aumento del 40% y un 18% los diez céntimos que ha subido el vinagre (de 0,55 a 0,65). Algunos que no han variado de un año a otro son el atún al natural, el café, el papel higiénico, el gel, el detergente, la lejía o las legumbres en conserva.

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