¿Por qué se plantean derribar el edificio del SOIB en Ibiza?

«Me ha sorprendido la falta de mantenimiento que tiene este edificio». El conseller de Empresa, Ocupación y Energía del Govern balear, Alejandro Sáenz de San Pedro, ha visitado este miércoles Ibiza con el cuchillo entre los dientes y escandalizado. El motivo fue el estado de conservación del edificio del centro de formación en sa Blanca Dona del Servei d’Ocupació de les Illes Balears (SOIB), una infraestructura que ha tenido que ser desalojada a causa de las graves deficiencias que han detectado los técnicos.

La señal de alarma se produjo el pasado mes de abril, cuando una parte del techo de las cocinas cedió. «Por suerte, sucedió por Semana Santa, cuando no había alumnos», explica Dolors Roig, directora insular del SOIB. Este incidente propició que se realizara un anñalisis en profundidad de las fallas que sufre la instalación, y las conclusiones han superado las previsiones más pesimistas.

«Habíamos recibido quejas sobre la aparición de grietas y desconchones», ha explicado el conseller Sáenz de San Pedro: «pero al realizar el estudio, nos hemos dado cuenta que los daños son de una magnitud superior a la imaginada». Según explica el conseller, «se han producido filtraciones de agua que han corroído la estructura del edificio y la han afectado profundamente. Se han hecho catas y mediciones y la conclusión es que el edificio se está muriendo».

Alumnos afectados

Según ha informado la conselleria, «la falta de mantenimieno ha provocado daños en el forjado, la cubierta y también los laterales, lo que ha llevado a una debilitación de la infraestructura».

A causa de las quejas recibidas, el pasado mes de septiembre se encargó un informe sobre el estado de la estructura y las conclusiones no dejan lugar a dudas: el edificio debe desalojarse: «Lo primordial era garantizar la seguridad de las personas», ha explicado el conseller.

Por este motivo, se ha precintado el edificio y se ha desalojado a los estudiantes que realizaban sus prácticas en esta instalación. En total, los afectados son 44 alumnos que se han repartido entre los dos institutos más cercanos: Sa Blanca Dona e Isidor Macabich. Respecto a los alumnos del módulo de Restauración que utilizaban las cocinas de este edificio, el próximo curso empezará durante el mes de enero y la conselleria todavía está barajando un lugar donde puedan realizar sus prácticas.

El edificio del centro de formación de sa Blanca Dona fue construido en el año 1979 con unos parámetros de seguridad y calidad en los materiales que no tienen nada que ver con los estándares actuales. Pese a que no se permitió a los periodistas acceder al interior del edificio, una inspección exterior fue suficiente para comprobar la presencia de grietas, desconchones y desperfectos en el recinto.

El conseller, ante este panorama, no ha desaprovechado la ocasión para cargar con dureza contra el anterior equipo de gobierno: «Estoy realmente sorprendido ante la falta de mantenimiento de esta infraestructura. Me llama la atención que un gobierno que se hacía llamar de izquierdas y que hablaba tanto de la educación pública de calidad, haya abandonado de esta forma este sitio».

El futuro del edificio todavía está en el aire, pero Sáenz de San Pedro ha asegurado que la semana que viene tendrán en sus manos un informe técnico definitivo que les indicará qué se puede hacer con esta edificicación: una posibilidad es reformarla; la otra, derribarla y construir un nuevo edificio.

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