FIESTAS DE CALA DE BOU

La pintura, de abuelas a nietos en Cala de Bou

El taller para diseñar camisetas organizado por las fiestas de la localidad saca el lado creativo de distintas generaciones

Abuelas, nietos y también algún que otro pariente, sacaron su faceta más artística ayer durante los talleres para pintar camisetas organizados en el club de la tercera edad de Cala de Bou con motivo de las fiestas de la localidad.

Entre las 10 y las 13 horas, unos cuarenta niños, que se habían inscrito previamente a la actividad con sus güeles (tan sólo había uno o dos abuelos), se mancharon las manos con pintura de tela para diseñar sus propias prendas, proporcionadas por los miembros de la Asociación de Mayores de Cala de Bou y financiadas por el Ayuntamiento de Sant Josep.

La pintura, de ‘guelüs’ a nietos | ÁNGELA TORRES

La pintura, de ‘guelüs’ a nietos | ÁNGELA TORRES / Ángela Torres

El taller, impulsado por Salvadora Andrade, presidenta de la asociación, se organizó por tandas de niños para que el «zafarrancho» multicolor no se les fuera de las manos, como explicó por su parte Cristina Zaragoza, vicepresidenta de la asociación de mayores. Así, cuando los primeros niños terminaron sus elaboraciones con ayuda de sus mayores entraron otros.

Cien camisetas blancas de tallas desde los tres hasta los doce años permanecían plegadas y envueltas sobre una mesa hasta que alguno de los asistentes decidía alegrarlas con alguna figura: una cebra, un caballo, un unicornio o algún diseño propio. El ser mitológico fue el favorito de la mayoría de los niños.

Una de las mujeres de la asociación de mayores prepara los materiales para la actividad

Una de las mujeres de la asociación de mayores prepara los materiales para la actividad / Á.Torres

Zaragoza y las alumnas de las clases de pinturas de tela que imparte en la misma sala de Cala de Bou daban consejos técnicos a los pequeños durante la sesión para que el resultado fuera el mejor, como utilizar «la esponja en lugar del pincel» para evitar el descontrol de los colores al aplicarlos sobre la prenda.

Al terminar, los pequeños diseñadores mostraron a sus acompañantes las creaciones propias, que podrían lucir cuando se secara la pintura y después de disfrutar de una mañana de domingo en familia.

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