El nuevo paseo marítimo de Santa Eulària a Siesta costará 1,4 millones

El Ayuntamiento de Santa Eulària ya ha sacado a concurso las obras para habilitar un paseo en el tramo de litoral comprendido entre la desembocadura del río y la playa de es Caló de s’Alga, a los pies de es Puig d’en Fita y la urbanización Siesta. Los trabajos tienen un presupuesto máximo de 1,45 millones de euros y un plazo de ejecución de seis meses.

La previsión del Ayuntamiento es que las obras puedan empezar después del verano, ya que el plazo para la presentación de ofertas finaliza el 1 de agosto, de manera que estén finalizadas antes de la próxima temporada, según informó un portavoz del Consistorio.

Toda esta zona litoral se urbanizó en los años sesenta y, en la actualidad, «la comunicación mediante viales y peatonales es insuficiente y requiere una nueva actuación acorde con las instalaciones turísticas existentes», tal y como detalla la memoria del proyecto.

La imagen general que presenta carece de homogeneidad y de mantenimiento, sobre todo por la antiguedad de los muros y las escaleras de acceso a la costa desde la urbanización.

Con esta actuación se habilitará un sendero de 345 metros, ya que es un tramo inaccesible para personas con dificultad de movilidad, además de embellecer todo el entorno degradado por el paso del tiempo. Se da la circunstancia de que el Ayuntamiento lleva más de una década de espera para habilitar este paseo, pero la autorización de la Demarcación de Costas no llegó hasta hace dos años.

La intervención comprende desde el final de la calle Violetas, en las inmediaciones de la desembocadura del río, hasta es Caló de s’Alga. En todo este litoral se creará un paso peatonal pavimentado de entre 2,5 y tres metros de anchura, apto para sillas de ruedas y carritos de bebés, además de nivelar todas las rampas de acceso actuales. En este sentido, Santa Eulària compara esta intervención con la pasarela de madera habilitada entre Cala Nova y es Canar.

Mobiliario

Las obras incluyen el arreglo de la plataforma de hormigón de 1.785 metros cuadrados junto a es Caló de s’Alga, con nuevas escaleras de baño, la homogeneización del suelo, ahora repleto de grietas, y la instalación de dos pérgolas de madera para dar sombra a los bañistas.

A lo largo de todo el paseo se instalarán 14 bancos y siete papeleras, así como varias jardineras y balizas de iluminación. Todo el mobiliario urbano será de madera y piedra. Además, se eliminarán vario restos de estructuras junto al litoral, mientras que, en otros tramos, se levantarán muros nuevos para contener los taludes, utilizando en todos los casos piedra seca.

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