Elecciones 23J - Análisis

Victoria amarga del PP en Ibiza y Formentera y euforia en la izquierda por el Senado

José Vicente Marí Bosó (PP) y Milena Herrera (PSOE) serán los dos diputados ibicencos al Congreso. Juanjo Ferrer da la campanada y consigue el Senado con cerca de 3.000 votos más que el popular Miquel Jerez. Vox pierde fuelle y SumarMés queda en tercera posición

El bipartidismo ha vuelto a España por la vía rápida. Si alguien lo daba por muerto, se equivocaba, igual que erraban quienes ya situaban a ese superviviente de la política que es Pedro Sánchez fuera de la Moncloa. El miedo a la ultraderecha y a los extremismos ha vuelto a concentrar el voto tanto en las Pitiusas como en Balears y en toda España en torno a los dos grandes partidos. El voto útil se ha volcado en PP y PSOE y, aunque los conservadores ganan las elecciones, los votos no les dan para gobernar. Si no se repiten los comicios, una posibilidad muy real, Ibiza tendrá en esta legislatura dos diputados: el popular José Vicente Marí Bosó y la socialista Milena Herrera. En Balears han conseguido tres representantes cada uno en la Cámara alta, por uno de SumarMés y uno de Vox.

La sorpresa de la noche en las Pitiusas se vivió en la sede de Ara en Ibiza. Juanjo Ferrer, un independiente exmilitante del PI, ha ganado el Senado por la coalición de izquierda (PSOE, Sumar, Ara Eivissa, IU). Y eso que ni él confiaba en la victoria: «No creo que genere el mismo efecto que Pilar Costa», auguró el candidato hace unos días. Se equivocaba. Ferrer repite el éxito de sus antecesores Pilar Costa y Pere Casetes como representante pitiuso en la Cámara alta y le saca cerca de 3.000 votos a Miquel Jerez, el candidato popular. El PP, al igual que en 2019, cuando Patricia Abascal logró el escaño por primera vez para el PSOE en solitario, se queda sin senador. La derrota de Jerez es aún más dura si se tiene en cuenta que su partido, a diferencia de lo ocurrido hace cuatro años, ha ganado las elecciones en Ibiza.

En el PP la victoria nacional, en Balears y en las Pitiusas, donde en 2019 ganó el PSOE, no es que sea agridulce, es que es directamente amarga. Y eso pese a que casi ha doblado los apoyos que obtuvo hace cuatro años. Su líder nacional, Alberto Núñez Feijóo, no podrá formar gobierno, pese a mejorar con creces los resultados de las últimas generales, y en las Pitiusas no consigue la plaza al Senado. Vox pierde fuelle (en las Pitiusas se deja más de 400 votos) y se convierte en un lastre para el PP a la hora de contar con posibles apoyos para formar gobierno.

Sumar Més ha restado en Ibiza. Yolanda Díaz no ha conseguido atraer a todos los votantes de Podemos, y ni siquiera consigue sus resultados pese a ir en las islas con los nacionalistas baleares. No obstante, queda como tercera fuerza en las Pitiusas.

El tablero político nacional es ahora mismo un auténtico rompecabezas en el que partidos que apenas han logrado representación van a ser decisivos para el futuro gobierno. O pactos o nuevas elecciones