La pasarela que unirá Sant Jordi y Platja d'en Bossa, en Ibiza, costará 1,5 millones y se ejecutará este año

La emblemática casa de Can Pere Casetes será rehabilitada y usada como centro sociocultural

Redacción

La pasarela, con paso peatonal y carril bici, que conectará el núcleo urbano de Sant Jordi con Platja d’en Bossa, costará 1,5 millones de euros y se ejecutará este año, informa el Govern balear. Se trata de una reivindicación histórica de los vecinos y comerciantes de ambas zonas, que se ha ido posponiendo. Esta petición estaba ya incluida en el proyecto de construcción de las autovías.

El nuevo paso, dedicado exclusivamente a peatones y bicicletas, recorrerá un tramo de 1.100 metros, aproximadamente. Empezará al final de la calle del Avisador, pasará junto a Can Pere Casetes y, mediante una pasarela metálica, permitirá cruzar la autovía hasta llegar a la calle de la Gamba Roja, según ha añadido el Govern en una nota.

El trazado permite un paseo que facilitará observar las zanjas de cultivo de época romana localizadas en la zona durante la construcción de la autovía del aeropuerto. El proyecto incorpora una zona de descanso donde se instalará un panel explicativo de estos hallazgos para poner en valor el espacio que ocupan.

Cesión de Can Pere Casetes

Para sacar adelante el proyecto, el primer paso será la firma de un convenio entre el Govern y el Ayuntamiento de Sant Josep que incluirá el compromiso de la Comunidad Autónoma de financiarlo y construirlo, mientras que el Ayuntamiento asumirá la conservación y el mantenimiento en las condiciones adecuadas del nuevo recorrido.

Otro punto destacado del acuerdo entre las dos instituciones es la cesión al Ayuntamiento de Sant Josep de la antigua casa de Can Pere Casetes para rehabilitarla y usarla posteriormente como centro sociocultural en la zona de Sant Jordi.

Esta construcción, apunta el Govern, "tiene un considerable valor simbólico y patrimonial por su tipología —una vivienda rural tradicional de grandes dimensiones— y quedó deshabitad a raíz de las expropiaciones hechas para construir la autovía de acceso al aeropuerto" de Ibiza.

A través de esta cesión, el Ayuntamiento tiene la oportunidad de "recuperar esta edificación en desuso para dar solución a la carencia de espacios comunitarios en esta población", indica el Ejecutivo regional.

Una vez firmado el convenio, el Govern licitará el proyecto de construcción del nuevo vial. Las obras, que tienen un plazo de ejecución de seis meses, se llevarán a cabo este 2023, aseguran desde el Govern.

Al acto de presentación del proyecto han asistido el director general de Movilidad y Transporte Terrestre, Jaume Mateu, y el jefe del Departamento de Obras Públicas del Gobierno, Joan Mas.

Fondos del Impuesto del Turismo Sostenible (ITS)

La presidenta, Francina Armengol ha asistido a la presentación de esta obra junto al conseller de Movilidad y Vivienda, Josep Marí, y el alcalde de Sant Josep de sa Talaia, Ángel Luis Guerrero. La obra está impulsa por el Govern y se financiará a través del fondo del Impuesto del Turismo Sostenible (ITS).

La presidenta del Govern ha explicado que «es de justicia juntar aquello que se separó y hacerlo también con un paseo ciclista como el que se plantea en el proyecto».

Francina Armengol ha destacado «la carga que tiene recuperar Can Pere Casetes como símbolo de lo que significa luchar por el pueblo», en recuerdo de las movilizaciones contra la construcción de la autovía, y ha recordado la importancia del impuesto de turismo sostenible, que financia este proyecto, para «hacer unas islas, y el municipio de Sant Josep, más sostenibles».

Plano por donde discurrirá la pasarela.

Plano por donde discurrirá la pasarela. / CAIB

El conseller Marí, por su parte, ha afirmado que con este proyecto se podrá «coser la herida que significaban las autovías» con «un proyecto que pone de relieve la importancia del pueblo de Sant Jordi y que de una forma amable y más humana reconectará las dos zonas», a la vez que «ponemos en valor una equipación, como es Can Pere Casetes, que ahora mismo no tiene un uso».

El alcalde de Sant Josep, por su parte, ha agradecido «la sensibilidad del Govern para atender una deuda pendiente con Sant Jordi desde la construcción de las autopistas, como es reconectar el pueblo con el mar, tal como se prometió a los vecinos».

También ha destacado la importancia que tendrá Can Pere Casetes para «empezar a solucionar el déficit de instalaciones culturales y cívicas que tiene Sant Jordi, y todavía mejor si lo hacemos recuperando para todos los 'jordiers' un lugar tan simbólico como esta casa», ha dicho Guerrero.