La magia de la Navidad vuelve al Diverespai de Ibiza

Son las diez de la mañana y ya hay una gran cola de gente que espera con ganas que comience el primer día del Diverespai, ubicado en el Recinto Ferial de Ibiza. Después de dos años sin poder celebrarse por la pandemia, los más pequeños, impacientes, volvieron a saltar ayer en las colchonetas y disfrutaron de los talleres que organiza el Consell de Ibiza en este evento, que celebra su XXIII edición.

Las familias que esperan en la cola coinciden en que ya echaban en falta «esta mítica iniciativa para los niños». Rosa acude junto a sus dos hijas, María y Laura, de cuatro y seis años respectivamente, a la primera cita con el Diverespai. «Desde que anunciaron que hoy lo abrían no han parado de recordármelo casi cada día, así que hoy estamos aquí las primeras», indica Rosa entre risas.

Por otro lado está Marc, un niño de diez años que recuerda lo bien que se lo pasó hace un par de años junto a sus primos en el Recinto Ferial. «Me gustan casi todas las actividades que hay aquí, pero mi favorita es la parte de las videoconsolas», añade.

Antes de que entren los niños, Salvador Losa, conseller de Juventud, corta la cinta que da por inaugurado el evento junto a Marilina Ribas, directora insular de Juventud. «Después de un par de años sin poder celebrar el Diverespai estamos de vuelta con 5.000 metros de actividades para los niños, para que pasen la Navidad en familia y que puedan disfrutar acompañados de sus seres queridos», destacó el conseller.

Como cada año, los hinchables ocupan casi todo el espacio del Diverespai. Exactamente hay doce grandes colchonetas para niños de entre 1 y 12 años, además de ludotecas y bebetecas. Entre los castillos hinchables destaca el del Gallo Kirico o el hinchable del Arca de Noé. Por otro lado, también hay once talleres con actividades como pintacaras; decoración navideña de árboles de Navidad, belenes y manualidades; imanes de nevera; talleres de cocina y pastelería; fisher tips; taller de chapas y también una parte para enviar cartas a los Reyes Magos. La zona de videoconsolas tiene bastante público. De hecho, es la parte favorita de Luis, un chico de doce años. «Mi juego favorito es el ‘FIFA’, aunque también me gustan otros como el ‘Motorstorm’», indica el pequeño. Además, el Diverespai de este año quiere responder a la demanda de ocio por parte de los adolescentes y la necesidad de potenciar iniciativas dirigidas a estos. Por eso, el Recinto Ferial cuenta en esta ocasión con varias actividades dirigidas a chicos de entre 12 y 17 años, entre las que destacan los juegos de realidad virtual, los juegos de mesa y los escape rooms.

El teatro y la decoración son también dos de los puntos fuertes de este año. La programación acoge pasacalles sorpresa y un espacio en la carpa exterior para actuaciones de magia, teatro y cuenta cuentos. Habrá funciones diarias en horario de mañana y de tarde para que las familias disfruten de estos espectáculos en vivo.

Trabajar como monitora en el Diverespai es «todo un sueño» para Ana, la encargada del taller de imanes. «De pequeña siempre venía y lo recuerdo con mucho cariño porque quería que fuera Navidad solo para venir aquí», puntualiza la joven. «Hoy haremos imanes y mañana chapas para que haya variedad», cuenta. El proceso para hacer los imanes es sencillo, según indica la monitora. «Los niños tienen que pintar con rotuladores las plantillas, después los recortan y yo con la máquina los preparo», indica nerviosa el primer día del evento.

El taller de ‘hama beads’ es «uno de los que más gusta a los pequeños», según indica Ana, otra monitora. «Los niños tienen que poner las bolas de colores en la figura y luego con papel de horno se plancha y queda una figurita», indica. Los niños, en grupos de seis, cambian cada diez minutos, «aunque depende del tamaño de la pieza», cuenta la monitora, que ha estado varios años trabajando en el Diverespai.

Colaborar en este evento es todo un reto para Azahara, la monitora que está al frente del taller de pintacaras. Maquillajes de gato, superhéroes o dibujos animados son algunas de las pinturas que piden los niños. «Algunos son tan típicos que se pintan en unos minutos, pero muchos los tengo que buscar en Internet porque son complicados de hacer», cuenta Azahara. «En esta actividad tenemos que dar etiquetas para cortar la fila porque no nos da tiempo a pintar a todos los niños que vienen», explica. El tipo de pintura que usan es antialérgica y «se quita muy fácilmente», asegura.

Para acceder al Diverespai, que abre hasta el 3 de enero, se tiene que abonar una entrada de 2 euros que sirve para un solo acceso y que solo tienen que pagar los niños. Los padres, madres y acompañantes tienen la entrada gratuita. Igualmente hay un abono para todos los días de la feria por 10 euros por niño. Las familias numerosas que lo puedan acreditar cuentan con descuentos, de forma que la entrada normal tiene un coste de 1,50 euros y el abono de 7,50 euros. El horario de esta feria es de 10.30 a 14 horas por la mañana y de 17 a 20.30 horas por la tarde, y permanecerá cerrado los días 31 de diciembre por la tarde y el 1 de enero por la mañana.

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