Salvamento Marítimo prevé que este fin de semana puedan finalizar los trabajos de descontaminación del yate ‘Aria SF’, después de que se haya extraído la mayor parte del gasoil. Una vez que finalicen estas tareas, la empresa contratada por el armador para hacerse cargo del barco, hundido frente a Cap Martinet tras sufrir un incendio en Formentera, deberá presentar el proyecto de reflotamiento a Capitanía Marítima.
Según detalló ayer el jefe del centro de Salvamento Marítimo en Balears, Miguel Chicón, ya se ha accedido a los seis tanques del ‘Aria SF’, de los que dos de ellos se encontraban vacíos, mediante la técnica del hot tapping, que consiste en la succión del combustible a través del casco.
Con estas maniobras, se extrajeron un total de 11.000 litros de combustible hasta que ya empezó a salir agua de los tanques. Cuando se llega a este punto, «al cabo de dos días se vuelven a repasar estos tanques, ya para acabar de sacar el agua con restos de gasoil», explicó Chicón.
Ayer mismo estaba previsto que empezaran estas últimas maniobras de succión en todos los depósitos, así como la revisión de un tanque de aceite hidráulico de la sala de máquinas y de las baterías.
Todo el gasoil y el aceite se van achicando hasta unos tanques del barco auxiliar movilizado para los trabajos de descontaminación, que corren a cargo de la empresa Ardentia Marine. Para estos labores hay desplegados 14 operarios, entre técnicos y buzos, acompañados de varias embarcaciones de limpieza.
Todo el material contaminante del pecio se traslada después a tierra para que sea tratado por una empresa homologada en el tratamiento de los residuos Marpol
Puerto de Vila
Todo el material contaminante del pecio se traslada después a tierra para que sea tratado por una empresa homologada en el tratamiento de los residuos clasificados como Marpol, acrónimo del inglés marine pollution (contaminación marina).
Chicón indicó que el único puerto de las Pitiusas que cuenta con instalaciones para el tratamiento de estos restos es el de Vila, de manera que esta fue una de las causas que condicionaron que el ‘Aria SF’ se trasladara, por su proximidad, hasta Cap Martinet.
«Todas las actuaciones que se han llevado a cabo tienen una explicación lógica y operativa», subrayó el jefe de Salvamento Marítimo. El yate, que empezó a arder el pasado domingo en Cala Saona, se evacuó de la playa por la gran cantidad de barcos concentrados en esa zona litoral de Formentera que podrían verse afectados en caso de deflagración, según explicó el jueves el director insular de la Administración General del Estado, Enrique Sánchez.
Priorizar la seguridad
Además, si la embarcación hubiera quedado en Cala Saona, «no se habrían podido empezar los trabajos hasta hoy [por ayer] debido al mal tiempo», explicó Chicón. Después había que tener en cuenta la profundidad a la que podría acabar el pecio y los viajes que debían hacerse hasta puerto, «porque todas las operaciones deben hacerse a cabo en una zona que facilite las operaciones, para que sean lo más rápidas posible y que causen el mal menor». «No hay que olvidar que la gente que está trabajando bajo el agua se la está jugando cada día y su seguridad tiene la máxima prioridad», insistió.
«No hay que olvidar que la gente que está trabajando bajo el agua se la está jugando cada día y su seguridad tiene la máxima prioridad»
Una vez que Ardentia Marine finalice la descontaminación, deberá presentar el proyecto de reflotamiento del pecio a Capitanía Marítima. Dada la complejidad de estos trabajos y del traslado de los medios, además de los imprevistos por la meteorología, no puede avanzarse una fecha precisa para la retirada del yate. Así, Chicón calcula que podrá comenzar en un plazo de entre dos y cuatro semanas, «de la manera más rápida posible», señaló.
