La fuerte tromba de agua que ha caído en Ibiza ha provocado, de nuevo, un importante vertido de aguas fecales en el puerto de la capital. A la altura de los Andenes, entre los doce amarres para yates de gran eslora del Martillo y los pantalanes situados a la entrada de la zona portuaria, el agua fecal sale a borbotones por la boca de una alcantarilla de la red municipal.

Desde la Autoridad Portuaria explican que este escape de aguas residuales es "normal" cuando llueve, sobre todo en una cantidad tan apreciable como lo ha hecho hoy. Ya han avisado a la empresa de limpieza que tienen contratada para actuar en la zona, donde desplegarán barreras de protección.

Desde el Ayuntamiento explican que el derrame procedía de uno de los «aliviaderos de emergencia que se han mantenido abiertos para evitar que en casos de tromba de agua, se inunden los comercios y restaurantes de la Marina y el puerto». Este caudal ha sido previamente «tamizado» en el tanque de tormentas, apuntan desde Vila, por lo que vierte «agua de pluviales mezclada» con agua fecal, pero sin restos sólidos.