La reforma de Platja d’en Bossa se retrasa un año y no empezará hasta octubre

Las obras para el embellecimiento y renovación de la zona de Platja d’en Bossa, que comprende la avenida de Pere Matutes Noguera (Vila) y la calle Murtra (Sant Josep), no empezarán hasta el 15 de octubre de este año, un año después de lo previsto.

Según explican desde el Ayuntamiento josepí, llegar a un consenso entre todas las partes (dos instituciones, entidades vecinales y empresariales) ha sido un «proceso arduo», por lo que la licitación del proyecto no se publicó hasta el 15 de noviembre del año pasado, fecha en la que debían empezar las obras. Aunque en la Plataforma de Contratación del Estado se especifica que el estado de la licitación es de «evaluación», desde el Consistorio confirman que el contrato ya se ha adjudicado a la empresa Islasfalto y «está pendiente de firmar». Se ha adjudicado por debajo del precio de salida (algo más de 1,4 millones de euros), por 1,26 millones, indican desde Sant Josep.

En una reunión, mantenida en octubre de 2020 entre las diferentes partes, se dijo que los trabajos se aplazaban hasta «otoño de 2021», para no afectar a la campaña turística, ya que tienen una duración prevista de cinco meses. Y es que esta zona ha sido una de las más afectadas por la pandemia, dada su gran dependencia del turismo.

«Ante la preocupación que en muchos sectores genera la pandemia y los graves efectos económicos que ya está teniendo, los ayuntamientos nos hemos comprometido a evitar cualquier situación que pueda influir negativamente en la marcha de la temporada turística», indicaron desde Sant Josep en aquel encuentro.

Cabe recordar que el Ministerio de Turismo y el Govern balear formalizaron el convenio de ocho millones de euros, para destinar a inversiones en zonas turísticas maduras para paliar los efectos de la quiebra de Thomas Cook, en noviembre de 2019; del total, 1,6 millones se destinaron a mejorar esta zona de Platja d’en Bossa.

Licitación

En los pliegos del contrato se detallan las diferentes actuaciones a llevar a cabo en esta zona que, según las asociaciones vecinales y empresariales, «está abandonada». Por ello, el proyecto fija una reforma integral.

Entre los cambios, se llevarán a cabo trabajos de construcción de tuberías para agua y aguas residuales y de canalizaciones de aguas pluviales, además de la construcción de estaciones de bombeo. También se construirán rotondas, además de cambiar la pavimentación y asfaltado. Se instalará nuevo mobiliario urbano, señalización viaria y de tráfico y alumbrado exterior y se cambiarán las instalaciones de baja tensión.

Desde el Ayuntamiento de Sant Josep insisten en que se trata de muchos cambios en la zona, por lo que ha costado llegar a un acuerdo entre todas las partes, lo que «ha alargado la planificación y, por tanto, la licitación se ha demorado».

El proyecto unificará estéticamente el mobiliario urbano de la calle, a la vez que se mejoran las redes de servicios, la parte más costosa de la inversión. Además, representantes empresariales y vecinales realizaron varias sugerencias en cuestiones relacionadas con el arreglo de las paradas para el transporte público o la distribución de las zonas de carga y descarga, por ejemplo.

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