El Consistorio de Santa Eulària ha gastado un total de 941.902,71 euros entre enero y septiembre en ayudas económicas entregadas a familias para cubrir sus necesidades básicas de alimentación, artículos de farmacia y ayudas sanitarias como dentista o gafas, ropa, traslados, alojamiento, residencias de mayores, escuelas de verano, actividades extraescolares y material escolar, o suministros, entre otras cuestiones.

Esto supone que en nueve meses casi se ha duplicado el gasto en comparación con el año 2019, cuando se destinaron a este fin un total de 529.954 euros, de acuerdo con el balance elaborado por el departamento de Servicios Sociales, en el que se detalla la «alta presión de demanda asistencial» que ha tenido el servicio en este año y que está relacionado, presumiblemente, con la crisis sanitaria provocada por el Covid-19.

El perfil de las personas y de las familias que han contactado con el departamento -a través del correo electrónico, por teléfono en la línea directa activada o presencialmente en las oficinas- y que han solicitado este tipo de ayuda ha correspondido, por un lado, a usuarios de Servicios Sociales que «finalizaban un plan de intervención que habían iniciado dos o tres meses atrás y que se tiene que prorrogar», detallan las citadas fuentes.

Por otro, se encuentran personas o familias que no habían sido atendidas antes en el departamento y cuyas circunstancias laborales y, por tanto, económicas se habrían visto afectadas por la pandemia.

Entre ellas están quienes habitualmente trabajaban en la hostelería durante la temporada y este año no lo han hecho; autónomos temporales; artesanos; personas que trabajaban en la construcción y a las que se les había acabado el contrato pero no sabían cuándo cobrarían la prestación que les corresponde; empleados del sector de la restauración, el comercio y otras empresas de servicios que se han visto afectados por ERTE y no sabían si tendrían derecho a cobrar alguna prestación o personas que trabajan en economía sumergida -limpieza, cuidado de niños o mayores, chapuzas relacionadas con la construcción, jardinería- y no tienen derecho a prestación o subsidio, explican.

Por otra parte, las trabajadoras del departamento tramitaron con carácter de urgencia 51 peticiones de la prestación extraordinaria de la Renta Social Garantizada entre el 1 y el 4 de abril, y otras 181 con carácter ordinario desde el 17 de abril y hasta el 31 de octubre. Asimismo, se dio curso a 63 solicitudes del ingreso mínimo vital.

Demandas de ayudas Covid-19

En cuanto a solicitud de información por parte de los ciudadanos sobre las medidas sociales y económicas relacionadas con el Covid-19, desde el 14 de abril se han atendido 2.808 demandas. Éstas han versado sobre suspensión de desahucios por impago de alquiler, prórroga de alquileres, subsidio de desempleo excepcional, subsidio de empleados del hogar, renta mínima de inserción, suministros, moratoria de la deuda arrendaticia, avales para el pago del alquiler, ayudas directas al alquiler, protección de los consumidores, moratoria de hipotecas, medidas para proteger el empleo, derecho al paro, permisos recuperables o ayudas a autónomos y empresas, entre otras cuestiones.

En el caso específico de las ayudas al alquiler del Ayuntamiento, que contaban con una partida de 349.707,04 euros, desde el 6 de mayo y hasta el 3 de junio se tramitaron 516 solicitudes y se concedieron 293 ayudas.

Y en cuanto a las ayudas municipales a autónomos y pequeñas y medianas empresas, dotadas con un total de 820.000 euros, del 3 al 22 de junio se gestionaron 946 solicitudes y se concedieron 336.