El Tribunal Supremo ha admitido a trámite un recurso de la Autoridad Portuaria (APB) contra la sentencia de mayo de 2020 dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB) que anuló por un defecto de forma la adjudicación de la concesión del Club Náutico de Ibiza.
En concreto, el fallo judicial declaró no conforme a Derecho el acuerdo del consejo de administración de la APB de julio de 2018 que ratificó la elección de la oferta presentada por el Club Náutico de Ibiza como «la de mayor interés portuario para adjudicarse la concesión para la gestión de esta zona del puerto» de Eivissa, informan desde el organismo portuario.
El club madrileño Doce Millas, que quiere arrebatar al Club Náutico de Ibiza la gestión de sus instalaciones recurrió y ganó este primer pulso judicial. Pero ahora es el Tribunal Supremo, tras la admisión a trámite del recurso de la APB, el que debe decidir.
El Club Náutico informo ayer a través de un comunicado de que la aceptación del recurso judicial es una noticia «esperanzadora que abre la puerta a revisar la aprobación definitiva del trámite de competencia de proyectos por el que se adjudicó a la entidad náutica ibicenca la gestión de las instalaciones que venimos ocupando como club social y deportivo sin ánimo de lucro desde hace 95 años».
En el caso de que finalmente el Supremo no estimara el recurso de la APB, se debería reiniciar todo el proceso de licitación.
En el mismo comunicado, el Club Náutico anuncia que «está analizando el concurso de ocupación temporal de estas instalaciones náuticas publicado ayer por el Butlletí Oficial de les Illes Balears». Esta es la solución provisional que ha adoptado la APB mientras espera la resolución del Supremo que puede tardar varios años. «Somos conscientes», añade la nota, «de que la renovación definitiva de la concesión requiere de un ejercicio de resistencia, tanto por su compleja tramitación como por los ingentes recursos económicos con los que cuenta la entidad demandante, denominada Club Básico 12 Millas, representada en el procedimiento judicial por el despacho del abogado madrileño Francisco Javier Jiménez Cisneros Cid».
La histórica entidad náutica ibicenca recuerda que Jiménez Cisneros «emitió en 2009, a petición del entonces director de la APB, Ángel Matías, condenado en el caso Mar Blau, un informe sobre el Club Náutico de Ibiza en el que calificaba la explotación de amarres como 'una actividad suntuaria que no puede ser considerada estratégica ni relevante para un puerto'».
En dicho dictamen, agrega la nota, «se oponía a la prórroga de la concesión del Club Náutico de Ibiza y recomendaba someter la concesión a concurso público». «Se da la circunstancia —abundan desde el Club Náutico— de que seis años después de haber realizado el citado informe, Francisco Javier Jiménez Cisneros Cid avaló de su propio bolsillo el proyecto de Club Básico 12 Millas.
