La conselleria de Medio Ambiente y Territorio informó ayer que el canon de residuos se implantará a partir del 1 de julio de 2021 para gravar el depósito en vertedero y el tratamiento mediante incineración de los residuos domésticos o municipales.

A través de un comunicado, la conselleria destacó que este canon se aplicará con carácter «singular e insularizado», es decir, el canon solo tendrá como objetivo «financiar proyectos que contribuyan a mejorar la gestión de los residuos». «Lo que se recaude en una isla se reinvertirá en esa misma isla», subrayó este departamento.

Además, las tarifas aumentarán de forma progresiva y partirán de un precio «simbólico», de entre uno a cuatro euros por tonelada, debido a la situación provocada por la covid-19. La conselleria subrayó que el canon se ha diseñado siguiendo la filosofía de «quien contamina, paga», por eso, se grava únicamente el vertido y la incineración.