Los propietarios de un centro de yoga en Benirràs ha retirado las hamacas, tiendas de campaña y tipis que comercializaba para dormir en su finca a través de la plataforma Airbnb, según informó ayer el Ayuntamiento de Sant Joan. El Consistorio también está pendiente de que se retire un autobús, que también se alquilaba para dormir, para lo que ha dado de plazo a los propietarios hasta el lunes de la semana que viene.
La Policía Local de Sant Joan acudió a inspeccionar esta finca después de que este diario publicara, a finales de julio, que comercializaba plazas para pernoctar en instalaciones que en ningún caso podrían llegar a obtener la cédula de habitabilidad. Tras levantar acta, el Ayuntamiento ordenó que se retiraran todos los elementos que se repartían en la finca para alquilarse ilegalmente.
Aunque, según Sant Joan, ya se han quitado las hamacas, tiendas de campaña y los tipis del lugar, la propiedad ha pedido que se le dé de plazo hasta el día 16 para retirar el autobús, con el argumento de que hasta ese día no puede contar con una empresa especializada para hacerse cargo del trabajo. En caso de que este plazo no se cumpla, será el propio Ayuntamiento el que se encargue de llevarse el viejo vehículo, del año 1959, que servía de habitáculo.
El centro de yoga de Benirràs ofrecía hasta 16 alojamientos repartidos por su finca a través de Airbnb, con los que podían llegar a obtener más de 1.500 euros diarios, según las tarifas que anunciaban en esta plataforma digital. Así, el precio para dormir en el «autobús vintage» ascendía hasta los 133 euros la noche en el mes de agosto, mientras que los tipis oscilaban entre los 220 y los 123 euros en función del tamaño. Dormir en la hamaca, al aire libre, salía por 23 euros.
