¿Visita en la cárcel al exconseller José Juan Cardona?

Muy a menudo.

¿Cómo se encuentra?

Tiene una fuerza interior importante, pero en este momento está triste y decepcionado porque no comprende que con el comportamiento que tiene y que es reconocido por todos no se le concedan permisos. Lleva ya más de 60 recompensas dentro de la prisión y seis informes por unanimidad de la junta de tratamiento que recomiendan darle un permiso. Y sin embargo el juez de vigilancia penitenciaria en Balears, al que se le ve poco por Ibiza, ojo al dato, parece que tiene más conocimiento que la junta de tratamiento, que está día a día con él [Cardona], y no se lo concede.

¿Entiende que Cardona se niegue a reconocer su culpa como una vía para conseguir permisos penitenciarios?

Es una cosa muy personal. Su postura es la de no reconocerse culpable. Si hubiera querido hacerlo, lo habría hecho antes del juicio llegando a un acuerdo con el fiscal, como hicieron Ordinas y otros. Esas personas, pese a que se ha demostrado que escondían dinero en una lata de colacao , están en la calle. Dijo que creía en la Justicia y que, al no ser culpable, quería un juicio justo. Le impusieron16 años. No me meto en si es una condena justa o no, pero es una barbaridad de tiempo. Es la pena más alta impuesta por un tema de estos en España.

¿Cree en su inocencia?

Si él dice que es inocente, yo le creo. Como abogado, respeto a la Justicia, pero no comparto esta pena.

¿Por qué no ha tirado de la manta?

Cada uno es como es. Lo que voy a decir no es lo correcto, pero no estoy de acuerdo con la justicia penal pactada. Me parece que los fiscales no son nadie para decidir, en nombre del pueblo español, que si una persona admite su culpabilidad y se evita el juicio se le imponga una condena menor. O, si no, te la juegas y te condenan a una pena mayor. Es muy cómodo. No sólo pasa en España. Me parece injusto. En Justicia, el que la hace la paga. Y quién no la hace, tiene derecho a que no se le mire con animadversión por no haber facilitado el trabajo.