La nueva situación creada con la inclusión de Lina Sansano como concejala no adscrita deja al PP con nueve concejales, lo que alimenta más las especulaciones y los posibles pactos de gobierno o acuerdos posteriores. En este contexto, son Sansano y Sánchez-Jáuregui las que tienen la sartén por el mango y las que pueden decantar con su voto la acaldía hacia uno u otro lado. Ambas han salido del PP, se encuentran molestas con el partido y, a pesar de que el voto de Sánchez-Jáuregui permitió aprobar los últimos presupuestos, su comportamiento es imprevisible. Ahora bien, la llegada de Mar Sánchez puede hacer reconsiderar el posicionamiento de las dos ediles nos adscritas.

Ahora también surge la duda de qué pasará con el concejal del PREF Nacho Rodrigo, si como anunció ayer Vicent Serra debe salir del equipo de gobierno y si, en ese caso, entregaría el acta de concejal. El PP no desea a Rodrigo en el equipo de gobierno, pero el PREF no quiere perder un concejal. Luego está el caso de Juan Daura, que dimitió de sus cargos de gestión, pero se mantiene en el equipo de gobierno dándoles su voto. Pero hasta este escenario podría cambiar si la criba de dimisiones continúa en los próximos días y hubiera algún otro concejal que dimitiera y no entregara su acta de concejal.