La presidenta del Govern balear, Francina Armengol, se trasladó ayer a Formentera, en un viaje relámpago, para firmar, junto con la presidenta del Consell de Formentera, Alejandra Ferrer, dos convenios incluidos en el plan de choque para la reactivación económica, que ascienden a 210.000 y 105.000 euros respectivamente.

Armengol explicó que, debido a la singularidad de la administración insular de Formentera, que incluye un ayuntamiento y un consell en la misma institución, le corresponden sendas aportaciones económicas.

El convenio también implica por parte del Consell de Formentera destinar la misma cifra, con fondos propios, al mismo fin. De esta forma se crea un fondo de 630.000 euros para ayudas a las pequeñas y medianas empresas y para los autónomos.

El convenio establece que sea el Consell de la isla el que establezca los criterios para distribuir ese fondo de reactivación económica. Francina Armengol manifestó: «El Consell será el encargado de sacar esta convocatoria de ayudas, ya que conoce mejor que nadie las necesidades que tiene la isla, desde la proximidad».

Los datos de contagio

La presidenta del Govern recordó, al iniciar su comparecencia en Formentera, que los actuales datos de contagios por covid que ofrece la isla «no son alentadores», ya que la incidencia acumulada a 14 días es de 1.081 casos y a siete días de 404 casos por cien mil habitantes: «Aunque vamos mejorando, estamos lejos de estar bien», manifestó.

Por su parte, la presidenta del Consell, Alejandra Ferrer, avanzó que la idea «es que este dinero lleguen a quienes más lo necesitan y no a aquellos a los que nos les haga falta y lo debemos hacer de forma ágil, ya que entendemos que las personas necesitan disponer de estas cantidades». En cuanto a las cifras, Ferrer señaló: «Tendremos que modificar el presupuesto para incorporar estas cantidades, lo que no quiere decir que no empecemos a trabajar ya para hacerlo cuanto antes».

Es decir, que este plan de ayudas deberá pasar antes por el pleno del Consell, que deberá aprobar los criterios de distribución de las ayudas y de los conceptos a los que se destinan y, además, deberá modificar el presupuesto de la institución de este ejercicio para que sea efectivo.

La presidenta del Govern balear, Francina Armengol, explicó en Formentera que los servicios de salud están evaluando en estos momentos si es conveniente o no realizar un cribado masivo a la población, con test de antígenos, tal y como reclama, por unanimidad, el pleno del Consell de la isla.

«Los cribados masivos de antígenos siempre dependen de un criterio técnico y sanitario, ya que no solo se tiene en cuenta la incidencia acumulada sino que también depende de si los casos son de brotes ligados entre ellos o existe una dispersión muy alta de la propagación de la enfermedad», recordó Armengol.

Aseguró que en Formentera se realizan los rastreos como en el resto de las Balears «y se está valorando si [los contagios] están relacionados con brotes concretos o si estamos en un momento de dispersión alta, de tal forma que el cribado sea efectivo».

Armengol dio especial importancia a este factor para realizar este test masivos: «Hemos hecho algún cribado en municipios con incidencia alta que no ha sido efectivo porque los casos fueron muy pocos y eso provocó una sensación de relajación en la ciudadanía que choca con la realidad».

La presidenta del Govern insistió en que se trata de decisiones técnicas y en que el Govern balear pondrá todos los recursos públicos para que se pueda hacer: «En Formentera la postura es que si se sigue con estos índices de incidencia complicados, se plantearía [el cribado] a partir de la semana del 7 de febrero, aunque es prematuro asegurarlo».