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Siembra de almendros en el Pla de Corona.

La isla que nos use

Esperanza blanca y rosa

Tras años de declive, una serie de iniciativas

da nueva vida a los almendros de la isla de Ibiza

Es la temporada de floración de los almendros de Ibiza, un momento clave en el calendario natural de la isla, pero también una época acompañada de una multitud de reportajes exponiendo el progresivo declive de este árbol tan simbólico.

No se puede negar que se encuentra en peligro. Desde los años sesenta, cuando los almendros llegaron a cubrir unas 5.600 hectáreas, los campos se han ido reduciendo progresivamente. Según estima el Consell de Ibiza, la superficie productiva de almendros hoy en día equivale solamente a unas 100 ha, ya que la mayoría de los campos se encuentran en situación de descuido con los árboles cerca del final de su vida biológica (unos 70 años).

Sin un esfuerzo concertado para recuperarlo, este cultivo tradicional, que se remonta a la época fenicia, hace más de 2500 años, corre el peligro de perderse por siempre. Entre el rápido abandono del suelo agrícola de secano, vinculado al surgimiento del turismo como motor económico, y la competencia de mercados mucho más grandes en la península y en EE.UU., sobre todo en California, el almendro ibicenco ha dejado de ser una cosecha rentable.

No obstante, debido a varias iniciativas que se han llevado a cabo en los últimos años, comienzan a aparecer algunos brotes verdes de esperanza. Desde IbizaPreservation aportamos en 2018 25.000 euros para un proyecto piloto con Apaeef (Associació de Productors d’Agricultura Ecològica d’Ibiza i Formentera) en el que se plantaron unos 550 árboles en Cas Secorrat, una finca ecológica en Buscastell.

Almendros en Santa Agnès.

Para poder aprender de esta experiencia Apaeef está realizando el seguimiento de la evolución de los árboles, la fertilidad, el almacenamiento de carbono en los suelos, el agua y la biodiversidad.

En paralelo, con el fin de contribuir a la sustitución de los almendros del Pla de Corona, promovido por la Asociació de Vesins de Corona, desde IbizaPreservation subvencionamos con 10.000€ la plantación de más de 200 árboles de diversas variedades, con distintas condiciones de agua. La iniciativa contó con el respaldo técnico del Consell de Ibiza.

Es una excelente noticia ver que los vecinos de Santa Inés han retomado el relevo y están promoviendo la plantación de más almendros en Corona. Este año han comprado unos 230 almendros para sus miembros.

Riego sostenible

Josep Lluís Joan, técnico de agricultura del Consell: «Se puede abrir la posibilidad de reconvertir y recuperar el sector de forma profesional, mecanizada, con un riego de soporte y sostenible. El punto crítico será que se pueda comercializar de forma diferenciada y con un precio superior e independiente del que hay en el mercado internacional. Hemos podido apreciar que si se realizan campañas conjuntas por parte del sector elaborador, el consumidor responde al apreciar una calidad superior al probar el producto».  

Afortunadamente, cada vez más agricultores se están sumando al reto de recuperar este cultivo, tanto extranjeros como ibicencos. La siembra de almendros más numerosa de los últimos tiempos, de unos 900 nuevos árboles, se realizó en la finca de una pareja sueco-canadiense, en San Mateu, al introducir una innovadora práctica que permite la siembra de almendros en secano.

También la Cooperativa Agrícola de Sant Antoni acaba de poner en marcha un proyecto experimental que aportará datos de inversión y productividad tras la plantación de 500 almendros en regadío. Debe tenerse presente que en los últimos años, se ha desplomado la cantidad de almendra recogida por la Cooperativa de unas 94 toneladas en 2017 a 16 en 2020.

A través de estas nuevas plantaciones de almendros se espera demostrar que la cosecha puede ser rentable, si se planta de manera adecuada y asegurando que el trabajo de mantenimiento pueda ser mínimo, para así animar a más agricultores locales a apostar por ella.

La almendra ibicenca no puede competir a nivel de precio con otras que provienen de plantaciones intensivas y de bajo coste, por lo que deben ponerse en valor sus altas cualidades nutritivas y el especial dulzor de las variedades tradicionales.

En algunos casos debería sin embargo tomarse en cuenta también el servicio ambiental y paisajístico brindado por los almendros, y complementar el ingreso de los agricultores con algún tipo de ayuda, pública o privada que reconozca su contribución al mantenimiento del paisaje y al turismo sostenible.

El Observatorio de Sostenibilidad es un proyecto de IbizaPreservation.

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