La UD Ibiza viajará la próxima semana a la Costa del Sol con la vitola de favorito al ascenso de categoría, no sólo por la envergadura del proyecto armado por Amadeo Salvo, sino por un frío pero revelador dato estadístico: la escuadra de Pablo Alfaro es la que menos goles recibió durante la temporada regular de entre los 80 equipos que componen la Segunda B, por tanto también de entre los 16 candidatos al ascenso.

El equilibrio y la solidez del cuadro celeste quedaron patentes a lo largo de las 28 jornadas disputadas antes del parón, en las que tan solo encajó 18 goles (0,6 por encuentro). Se trata del mejor dato defensivo de todos los aspirantes al salto de categoría, incluidos los campeones de grupo. El Atlético Baleares cerró el curso regular con 22 tantos recibidos, 19 encajaron el Logroñés y el Cartagena y 24 el Castellón. El Cornellà, rival de los celestes en la primera eliminatoria, despidió el curso en marzo con 25 dianas en contra.

El blindaje defensivo será una de las claves del éxito para los participantes en el 'play-off exprés' que comenzará el sábado 18 en tierras malagueñas. En las eliminatorias a partido único mantener la portería a cero garantiza, como mínimo, llegar a los penaltis, por lo que la escuadra ibicenca alcanza la cita decisiva de la temporada con una de las herramientas más fiables para tratar de dar el salto al fútbol profesional. En concreto, los celestes se mantuvieron imbatidos en 15 de los 28 encuentros disputados en el Grupo I, y solo en la primera jornada de Liga recibieron más de dos goles en un solo partido (3-2 frente a Las Palmas Atlético).

Con seis derrotas en su expediente liguero, la formación de Can Misses sólo se ve superada en este apartado por el Marbella (una derrota), el Logroñés (2), el Cartagena (4), el Valladolid Promesas, el Cornellà y el Barça B (5).

Pablo Alfaro cuenta con los dos guardametas que mejor coeficiente de goles en contra presentan de todos los contendientes. El alicantino Germán Parreño sólo ha recibido 10 tantos en 18 partidos bajo palos -tres de ellos de Copa del Rey-, lo que arroja un coeficiente de 0,55 por encuentro; mientras que el brasileño Lucas Anacker recogió 11 balones de su portería en 13 jornadas como titular (0,8 de promedio).

Las cifras sitúan al subcampeón del Grupo I como la escuadra más sólida de la histórica fase de ascenso que arrancará en el Estadio Ciudad de Málaga para los celestes. Una estadística que, como es lógico en el fútbol, puede quebrantarse, pero que sirve para hacerse una composición de lugar sobre el potencial y las probabilidades de éxito que tiene el colectivo de Pablo Alfaro.

Bajas sensibles en la zaga

Bajas sensibles en la zagaNo obstante, la formación celeste presentará bajas sensibles en la línea defensiva para la primera eliminatoria, donde Alfaro no podrá contar con el argentino Mariano Gómez ni con el francés Pierre Cornud por sanción. Tampoco con David Morillas, que está sin ficha tras permanecer seis meses en el dique seco por una grave lesión. En principio, el lateral murciano no podrá participar.

Alfaro deberá recomponer la retaguardia, que podría estar formada por Kike López y Fran Grima en los laterales, con Gonzalo de la Fuente y Rubén González en el centro de la zaga. También podría jugar el central Álex Quintanilla y desplazar a Rubén al lateral zurdo.