n La Unión Deportiva Ibiza se ha conjurado esta semana para estabilizar su andadura por el Grupo IV de Segunda B y ofrecer su mejor versión en el estadio vinícola del 'galáctico' Jumilla, club filial y colaborador del Wolves británico de la Premier League (12 horas).

La escuadra que entrena Andrés Palop medirá además su fondo de armario en tierras murcianas, donde acude con cuatro bajas, dos de ellas por sanción, del capitán Verdú y el mediapunta Chavero, y dos por lesión: Fran Grima y Marco Borriello.

El técnico valenciano avanzó en la previa del encuentro que el equipo está teniendo «una buena regularidad y tiene cierto equilibrio», pero también advirtió de que necesitan «aumentar el porcentaje de fiabilidad» para evitar cataclismos como el padecido en Cartagena hace dos semanas (2-0).

Ante las bajas, el exguardametainternacional podría incorporar a Javi García al centro del campo, con el regreso de Candelas al lateral izquierdo, o bien devolver a Armenteros a la mediapunta. Bajo palos es previsible que repita el brasileño Lucas en detrimento de Álex Sánchez, señalado tras la derrota en Cartagonova.

El triunfo balsámico y no exento de prestigio cosechado por los celestes frente al UCAM Murcia fue el mejor antídoto contra la depresión; por eso la expedición ibicenca sólo piensa en ofrecer su mejor imagen y volver a ganar a domicilio.

Enfrente, el Jumilla del portugués Leonel Pontes es el quinto mejor equipo del grupo cuando actúa como local. En el estadio Uva Monastrell sólo ha cedido una derrota, mientras que ha celebrado cuatro triunfos y dos empates.

Bajo el paraguas del Wolverhampton Wanderers, el club murciano se ha podido reforzar con futbolistas internacionales de talla, sobre todo en la parcela ofensiva, como Donovan (5 goles), Boubacar (2), Ben Stevenson o Will Randall.

«Es un partido importante para dar un paso adelante», señaló Pontes sobre la visita de la UD Ibiza, a quien considera un rival «imprevisible». «Tiene jugadores de calidad, una banda izquierda muy fuerte, que juega la pelota y será difícil», indicó.