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Toni ‘Moreras’, Marcos Contreras y Sergio Tortosa, ayer en Can Misses-3. | R.J.P.

Marcos Contreras cuelga los guantes para dirigir al CD Ibiza, «una casa enfangada»

El hasta ahora portero y capitán de los rojillos se sentará en el banquillo para suplir la marcha fulgurante de Kevin Martínez e intentar salvar al equipo del descenso

«Cuando la casa está enfangada nos tenemos que remangar todos, sin jerarquía. Nos hemos metido en el fango todos juntos. No quiero buscar culpables, sino soluciones». Con estas palabras resumió Marcos Contreras la situación por la que atraviesa el CD Ibiza, al que dirigirá hasta final de temporada tras la marcha de Kevin Martínez 48 horas después de ser anunciado como el sustituto del cesado Manu Calleja.

El sevillano Contreras cuelga los guantes a sus 37 años para intentar salvar al equipo del descenso a Tercera División y mejorar la imagen de un club que, como reconoció Sergio Tortosa, «está manchado» después de su declive deportivo y la fulgurante salida de Kevin Martínez.

El director deportivo de la entidad admitió estar «decepcionado» por el «drástico» cambio de opinión del joven entrenador, «que se ha conocido en toda España».

Marcos Contreras ha sido el escogido para tomar las riendas del equipo, que se encuentra a ocho puntos de la salvación. El portero y capitán, consciente del reto, asume su nuevo rol con asombrosa confianza. «He sentido que [los futbolistas] están conmigo a muerte. Considero que tengo capacidad para hacerlo y el carisma suficiente para ayudarles a revertir esta situación», señaló durante su presentación, en la que añadió que como persona «honesta y coherente» intentará «ser lo más justo [con los jugadores] mirando por el beneficio del colectivo».

«Es cierto que los acontecimientos han precipitado la decisión. La idea es intentar ayudar a los chicos a que nos salvemos y seguir mi carrera en este club que tanto quiero como entrenador y colgar los guantes», reconoció Contreras, que lleva más de una década en las Pitiusas defendiendo los escudos del Formentera y el CD Ibiza.

Ahora, su objetivo inmediato es «que cada uno recupere su mejor versión» y lograr un primer triunfo, mañana en casa frente al Manresa (12 horas), que «cambie la energía» del grupo.

Por su parte, Sergio Tortosa asumió «la responsabilidad» de la crisis deportiva de los rojillos aunque puntualizó que «a veces no firmamos lo que más nos gusta, sino lo que podemos pagar». «El año pasado hicimos una temporada increíble quedándonos a un punto y nos pensábamos que la siguiente íbamos a ir a play-off y ascenso directo. Para mí es una equivocación, una cura de humildad», subrayó.

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